Ignacio González niega presiones del PP en adjudicaciones de la Comunidad Madrid
El expresidente madrileño Ignacio Gonzálezha negado cualquier tipo de "presión" o "intervención" de la dirección del PP ni de su extesorero Álvaro Lapuerta para que se otorgaran adjudicaciones de la Comunidad de Madrid, aunque sí ha reconocido que éste último se interesaba por estos asuntos.
En su declaración ante la comisión de investigación del Congreso por la supuesta financiación irregular del PP, González, imputado en el caso Lezo, ha comenzado diciendo que no ha "participado nunca en una organización criminal" ni ha "dirigido absolutamente nada".
"No he hecho ninguna práctica con el ánimo de perjudicar al Canal de Isabel II ni a la Comunidad de Madrid", se ha defendido el expresidente regional, que estuvo en prisión por el caso Lezo más de 6 meses hasta el 8 de noviembre de 2017, cuando pagó la fianza de 400.000 euros que el juez le impuso el día anterior.
González ha asegurado que "nadie ha podido acreditar que haya recibido dinero", que tenga un patrimonio "oculto", sociedades dinero en el extranjero ni "nada" de lo que se le está acusando desde hace tres años, y ha advertido que no respondería a preguntas que pudieran afectar a su derecho a la defensa.
En este sentido, se ha quejado de que durante todo el tiempo de investigación judicial "secreta" ha sido objeto de seguimientos "24 horas", de pinchazos, "han puesto micrófonos" en sus coches y "han perseguido" a toda su familia. Respecto a Lapuerta, ha indicado que le pareció "extraño" su "interés" -que se producía "permanentemente o con una cierta asiduidad"- por conocer asuntos que eran de gestión ordinaria de la Comunidad como "contratos, adjudicaciones y operaciones urbanísticas", pero ha puntualizado que no ejerció presiones más allá de ese interés.
"Llamar a interesarse hasta donde yo sé no es ningún delito", ha contestado a preguntas de por qué no denunció esas prácticas de Lapuerta, quien en todo caso no le llamaba a él para interesarse por las adjudicaciones, sino a los consejeros, según ha precisado.
"A mi no me ha llamado nunca ni el gerente ni el tesorero para decirme que había que hacer una adjudicación a nadie porque, desde luego, no lo habría consentido", ha añadido. También se ha referido a la conversación pinchada en el caso Lezo con el exministro Eduardo Zaplana en la que hablaron de un supuesto chantaje a Mariano Rajoy con una grabación en la que el expresidente de la constructora Degremont Rafael Palencia reconocía el pago de comisiones al PP.
Ante el Congreso, González ha reiterado que esa charla era una "conversación de café" en la que simplemente trataban un asunto que "se oía" de terceras personas, un "chascarrillo". El pasado febrero, el exconsejero Francisco Granados relató en la Audiencia Nacional que había una campaña electoral "paralela" para financiar gastos de Aguirre que dirigía Ignacio González junto con la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes.
Al respecto, González ha dicho hoy que él "nunca" ha participado en temas de financiación del partido y que, en todo caso, en el PP no había "ninguna estructura de financiación distinta de la que establece la ley".
El expresidente regional ha afirmado en todo caso que cuando en 2007 dirigió en Madrid la campaña a las elecciones autonómicas no llevó nada relacionado con la financiación, sino que se encargaba del "impulso político". El único momento de tensión se ha producido en la intervención del diputado de ERC Gabriel Rufián, a quien el presidente de la comisión, Pedro Quevedo, le ha llamado la atención por plantear preguntas provocadoras que no tenían que ver con el objeto de la comisión y que no han conseguido irritar a González.
Rufián ha llegado a preguntarle si se considera un preso político, si sabe qué es la UDEF o qué opina de la detención de un miembro de los Comités de Defensa de la República (CDR). "Mire señor Rufián, yo he tenido la delicadeza de responderle a una serie de preguntas que nada tienen que ver con el objeto de esta comisión, y no voy a entrar en valoraciones políticas", le ha dicho finalmente después de que el diputado le haya recordado que "no se apellida Borbón".
"Su tarea es buscar un lío monumental y salir en primera página", ha increpado Quevedo a Rufián al término de su comparecencia.