En verano descenderá el número de contagios, el calor ralentizará la expansión, aunque sin detenerla, pero al final del otoño llegará una segunda oleada que se repetirá con una tercera en invierno, dice el documento, según el cual se tardará entre un año y año y medio en volver a la normalidad.

Eso sí, según este documento elaborado por una unidad cuyo trabajo habitual está relacionado con la estadística, la segunda oleada no será tan extensa ni tan letal como la primera porque enseguida se tomarán medidas de confinamiento fuertes.

También advierte de que el aislamiento no ayuda a detener la expansión, pero sí a ralentizarla para permitir al sistema sanitario ir respondiendo.

En el mismo documento, se advierte de que el mayor peligro serán las aglomeraciones, por eso consideran sus autores que sería "extremadamente importante" disponer de una aplicación de móvil de control de contactos.

También recoge las recomendaciones de la OMS sobre las mascarillas apuntando que el problema es la falta de disponibilidad en España de las FFP3.