Así lo ha avanzado el ministro del Interior,Fernando Grande-Marlaska, en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, que ha aprobado un plan dotado de 850 millones de euros para reformar y mejorar las infraestructuras de seguridad del Estado en los próximos siete años.
De esas medidas, una de las que Interior acometerá a corto plazo (este mismo año), será la retirada de las concertinas en los tramos del vallado "más vulnerables", es decir de aquellos que, bien por orografía o por otras circunstancias, son objeto de más intentos de saltos por parte de inmigrantes.
Marlaska ha advertido que en junio de 2017 un informe de la inspección de Interior ya apuntó que las concertinas no son un elemento "disuasorio" para las personas que tratan de acceder a España por el vallado en Ceuta y Melilla.