Un abarrotado banquillo con ocho filas de sillas. Casi 50 presuntos narcos. Y, prácticamente encajado entre los últimos acusados, Gonzalo Boye. Es la estampa que el abogado de Puigdemont ha estado tratando de evitar en los últimos años.
Pero ninguno de sus intentos de que la Audiencia Nacional desgajara de la causa principal su acusación por supuesto blanqueo y enviara su parte a la justicia ordinaria ha prosperado, y Boye se sienta desde este martes frente a un tribunal junto a toda la organización de narcos que dirigió Ramón Prado Bugallo, más conocido por su histórico alias, Sito Miñanco.
La cúpula de Junts ha escenificado su apoyo a Gonzalo Boye desplazándose a primera hora a la sede de la Audiencia Nacional de San Fernando. Los dirigentes independentistas Quim Torra, Jordi Turull, Laura Borrás o Miriam Nogueras le han escoltado hasta la entrada del edificio para poner el foco en que este es un "juicio político", como declaró ante los medios el portavoz Josep Ríus.
De esta forma, Junts amplifica las acusaciones de lawfare que viene defendiendo Boye, que atribuye su causa a una persecución judicial por ser el abogado de Carles Puigdemont.
En todo caso, la defensa de Gonzalo Boye se ha desentendido de la petición del resto de defensas para que se aplazara el juicio, y ha apoyado que la vista oral siga adelante como estaba programado, es decir, desde hoy y hasta el 30 de enero.
El tribunal de la Audiencia Nacional, que preside Alfonso Guevara, ha rechazado la solicitud de suspensión ante la incomparecencia de dos de los acusados, uno de ellos cumple condena en una cárcel de Senegal. "No ha lugar a la suspensión", ha señalado el magistrado, y el juicio ha arrancado según lo previsto.
Boye era "quien dirigía" el blanqueo de los 889.000 euros
El agente instructor de la UDYCO que coordinó la operación contra Sito Miñanco ha involucrado directamente a Gonzalo Boye en las supuestas maniobras de falsificación para justificar el origen legal de 889.000 euros que miembros de la organización trataron de llevar a Bogotá en el doble fondo de su equipaje cuando fueron descubiertos en el aeropuerto de Barajas
"La persona que ellos contactaron y con quien hablaban, quien dirigía un poco lo de justificar el tema del dinero con pagarés que ya habían utilizado en otro caso, era el señor Boye", ha declarado el instructor de la Guardia Civil.
También ha relatado cómo gracias a las escuchas policiales detectaron que Boye y otros abogados "no les estaban ayudando de manera profesional y legítima sino que están falseando documentos para justificar y que son plenamente conscientes".
En la fase de cuestiones previas, Eduardo García Peña, abogado de Gonzalo Boye, ha comunicado la aportación de nueva documentación. Según fuentes de la defensa se trata de registros migratorios oficiales emitidos por Colombia para tratar de demostrar que la reunión entre Gonzalo Boye, Sito Miñanco y el también acusado González Rubio en el despacho del abogado a la que alude el escrito de acusación de la Fiscalía, nunca pudo producirse.
Según estos nuevos documentos, González Rubio estaba en Colombia por aquellas fechas, "por lo que no pudo estar en Madrid en la reunión en la que dice el fiscal que estaban arreglando el blanqueo".
La defensa trata de apuntalar las conclusiones que ya presentó en un informe contrapericial de la UDYCO, “basado en los geoposicionamientos de los teléfonos móviles de todos ellos”, que acreditarían que Sito Miñanco tampoco pudo estar en el despacho de Boye en las fechas señaladas por el fiscal porque estuvo en Algeciras y Marbella.
La defensa también confía en lograr la absolución gracias a la confesión recientemente aportada en un documento por Gonzalez Rubio indicando que el dinero incautado era suyo.
Sito Miñanco y su poderosa organización
"No ha habido nunca organización tan poderosa", ha declarado este martes el instructor de la UDYCO, uno de los coordinadores de la operación Mito que logró la incautación de casi 4.000 toneladas de cocaína en alta mar y en un contenedor de los Países Bajos.
Este testigo hace hincapié en las cuantiosas cantidades de dinero que movía la organización dirigida por Sito Miñanco desde Algeciras, donde cumplía una condena por tráfico de drogas en régimen de tercer grado, trabajando en una gasolinera de la localidad gaditana.
Estas organizaciones "confeccionan sus lanchas, sus naves y sus infraestructuras, manejan redes de expertos en blanqueo, abogados, gastan muchísimo dinero". Según el agente, todos los movimientos de Sito Miñanco en forma de medidas de seguridad, desplazamientos y reuniones con personas que ya habían sido detenidas por formar parte de su organización en 2001 conducían a concluir que había que investigar.
La Fiscalía Antidroga solicita 31 años y medio de cárcel para Sito Miñanco, que pese a estar cumpliendo una condena por narcotráfico siguió en el oficio y "había hecho del narcotráfico su modus vivendi de manera continuada y estable y carecía de la más mínima voluntad de rehabilitarse y reinsertarse en la sociedad".
En el banquillo del juicio por la Operación Mito se sientan casi 50 personas físicas y jurídicas.