Tras reunirse algo más de una hora y cuarto con la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, Junqueras ha respondido a la pregunta de un periodista sobre si este encuentro de hoy era la demostración de que había un "deshielo": "Efectivamente, es la primera vez que estoy en Moncloa y su percepción es acertada en este sentido", ha contestado.
No obstante, ha precisado que otra cosa es ver en qué se traduce ese diálogo en los próximos días, para el que ha garantizado que la Generalitat catalana tendrá una "disposición absoluta".
Cada uno se ha comprometido a estudiar respectivamente las peticiones del otro y, en función de como evolucionen estos asuntos concretos, seguirán hablando de otros.
Junqueras ha solicitado a Sáenz de Santamaría, por ejemplo, que el Gobierno no recurra al Tribunal Constitucional la ley relativa a desahucios y pobreza energética, y la vicepresidenta le ha explicado que estudiarán mañana el tema en el Consejo de Ministros.
El encuentro con Sáenz de Santamaría ha sido "cordial" desde el punto de vista de las formas, pero "difícil" porque representan posiciones políticas "muy distintas desde muchos ámbitos", ha indicado el líder de ERC.
A su juicio, "es muy difícil" que él deje de ser independentista catalán y "es muy difícil" que Sáenz de Santamaría "se convierta en una defensora apasionada de la independencia".
Una reunión que es fruto del encuentro que el pasado día 20 mantuvieron en el Palacio de la Moncloa el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
La rueda de prensa posterior se ha celebrado en las instalaciones de Moncloa y no en la delegación oficiosa de la Generalitat en Madrid, tal y como ha sido habitual en los últimos años cuando una autoridad catalana visitaba Madrid.
En ese escenario, con las banderas de España y de la UE detrás, Junqueras ha reiterado que desde el Govern catalán están "predispuestos" y "con la mejor actitud para intentar llegar a acuerdos útiles para el conjunto de la ciudadanía".
Según sus explicaciones, durante la conversación ha trasladado a Sáenz de Santamaría la preocupación de la Generalitat por el contexto económico general y de que se suban los tipos de interés y se dispare el coste de la deuda de España, que llega al 100 por cien del PIB.
También le ha dicho que los gobiernos españoles, sean del signo que sean, "deberían dejar de priorizar las cuestiones de carácter político respecto a las de carácter económico", y tendrían que "intentar no dificultar" el crecimiento de la economía catalana, porque el hecho de que funcione "es bueno para todas las economías" con las que tiene relación.
Para Junqueras, la comisión bilateral técnica que en los últimos días ha alcanzado cinco pactos en distintas materias, que han evitado acudir al TC, funciona y lo hace "relativamente bien".
Con todo, ha recordado que en las últimas semanas el Gobierno ha presentado una batería de recursos.
Además, a su entender, el TC debería dejar de actuar de manera partidista y hacerlo en defensa de los intereses de la ciudadanía.
La Generalitat quiere igualmente que se convoque la Junta de Seguridad, que lleva siete años sin reunirse, y la vicepresidenta se ha comprometido a proponer una reunión para avanzar en este tema entre el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y e conseller catalán del ramo, Jordi Jané.
También ha dejado claro que están en contra del plan hidrológico tal y como está planteado.
Por parte de la Vicepresidencia, se les ha reclamado que tomen en consideración la firma de dos convenios que están pendientes: uno sobre gestión de emergencias y otro de conectividad en banda ancha de edificios escolares.