Así lo han dicho -cada uno a su manera- ambos partidos, Junts per Cataluña y PSOE en el Congreso: los de Carles Puigdemont votaran Sí a la investidura de Sánchez y nada de lo que pasó ayer lo evitará. Por su lado, el número 3 de los socialistas, Santos Cerdán - que reconocía que hay que ir engrasando el pacto- se comprometía a cumplir los acuerdos. Pero Miriam Nogueras recuerda hoy mismo que tampoco renuncian en su formación a celebrar un referéndum de autodeterminación y el traspaso total de las competencias en materia de recaudación de impuestos. Y es que forma parte del relato de Junts -ya lo anunciaron- mantener la tensión hasta el último momento. Y esta vez esa tensión venía por el discurso de Sánchez que enfureció a los diputados de Junts. Sencillamente por las referencias a la vuelta a la vía constitucional de Junts que según Sánchez se hará efectiva a partir de ahora y porque el candidato socialista evitó poner en valor el acuerdo con el expresident de la Genaralitat, Carles Puigdemont, a quien ni siquiera se refirió en la tribuna de oradores.
Todo ello hizo que ayer por la tarde se celebrara una reunión de urgencia entre la propia Nogueras y -de nuevo- el negociador principal del PSOE, Santos Cerdán, para tratar de restañar las heridas que pudieran haber provocado las palabras de Sánchez en la bancada liderada por la propia Nogueras.
Todo ha quedado en nada y -salvo sorpresas- Junts, tal y como ha anunciado ella misma en la cadena catalana de radio Rac1 esta mañana, dará su plácet definitivo a Sánchez en primera vuelta. Si todo sigue según lo previsto, el sábado habrá gobierno, con o sin ministros de Podemos y el lunes serán las tomas de posesión habituales.