Juzgan a una mujer por asesinar a su pareja, a quien denunció por maltrato
En septiembre de 2015, la mujer presuntamente asesinó a puñaladas a su pareja, a quien un año antes había denunciado por maltrato, después de que éste acudiera al domicilio de la acusada a insultarla y a intimidarla.
La Audiencia Provincial de Madrid juzga a partir del lunes a una mujer que en 2015 presuntamente asesinó a puñaladas a su pareja a quien había denunciado por maltrato un año antes.
El fiscal solicita para Gloria C.S., en prisión provisional por estos hechos, una pena de 17 años de cárcel por un delito de asesinato con la circunstancia agravante de parentesco, aunque pide que se le aplique una atenuante al considerar que la acusada actuó en "elevado estado de ofuscación".
Según el escrito provisional del fiscal, la acusada y la víctima mantuvieron durante tres años una relación sentimental "altamente conflictiva", lo que dio lugar a fuertes discusiones y a que la mujer denunciara por maltrato a su pareja, a quien le impusieron una orden de alejamiento a pesar de que posteriormente no fue condenado.
Durante el tiempo de convivencia, explica el fiscal, "eran frecuentes sus discusiones, en el transcurso de las cuales se proferían gritos, dando lugar a que la Policía tuviera que intervenir en diversas ocasiones".
El 20 de septiembre de 2015, la víctima acudió al domicilio de Gloria y comenzó a proferir gritos y a intimidarla a través de las ventanas, situadas a la altura de la calle.
Explica el fiscal que Gloria, en "elevado estado de ofuscación" por estos hechos y por la relación vivida con la víctima, lo cual "mermaba de forma grave pero sin llegar a anular su capacidad", se hizo con un cuchillo de 17 centímetros de hoja y salió al portal.
Acto seguido se acercó al hombre por detrás y, en el momento en que éste se giró hacia ella, "de manera sorpresiva y sin que pudiera repeler el ataque", le apuñaló dos veces en el pecho.
Además de la pena de prisión, el fiscal solicita que la acusada indemnice con 200.000 euros al hijo que ambos tenían en común y que a raíz de los hechos fue declarado en situación de desamparo por la Consejería de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid.