Las niñas estudian más y mejor y la brecha se produce cuando se accede al mercado laboral
Son datos del informe 'Igualdad en cifras' del Ministerio de Educación y Formación Profesional, publicado con motivo del próximo Día Internacional de la Mujer el 8M, y presentado en el acto 'Aulas por la Igualdad' por el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana.
El 66,5 % de todo el profesorado es mujer, porcentaje que aumenta al 71,9 % en las enseñanzas no universitarias y cae hasta el 41,3 % en la educación universitaria, según cifras del curso 2016-17.
Entre el porcentaje de catedráticos, ellos son el 77,5 % y ellas el 22,5 %.
Respecto a la educación no universitaria, en la última década la presencia femenina en puestos de dirección de centros ha aumentado quince puntos porcentuales hasta alcanzar el 65 %; también un 65,9 % de las secretarías están ocupadas por ellas y el 64,8 % de las jefaturas de estudio.
Los porcentajes crecen en Infantil (superiores al 93 %) y descienden a sus mínimos en los centros de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato y Formación Profesional (FP), 38,4 %, 47,4 % y 51,4 %, respectivamente.
Por otra parte, la brecha de género en las disciplinas científico-tecnológicas se observa entre el alumnado, tanto en las enseñanzas de FP como en las carreras universitarias.
Por ejemplo, únicamente el 8 % de los estudiantes que cursan Informática en FP de grado medio son chicas, así como el 4,9 % matriculado en Electricidad y Electrónica en FP superior, el 12,2 %matriculado en el grado de Informática o el 28,4 % de los grados de Ingeniería, industria y construcción (estos dos últimos datos corresponden al curso 2017-18).
Sin embargo, respecto a los resultados académicos, en general las chicas tienen más éxito que los chicos a la hora de superar cursos de ESO, Bachillerato y módulos de FP, y obtienen también los mayores porcentajes de egresados tanto en estudios de grado como de máster.
Así, el 51,9 % de las mujeres de 25 a 29 años ha finalizado estudios superiores, once puntos porcentuales por encima de los varones de ese mismo grupo de edad (40,9 %); y las tasas de abandono escolar temprano son más bajas entre ellas (14 % frente al 21,7 % de los chicos en 2018).
"Esta feminización de los estudios contrasta, sin embargo, con la masculinización del mercado laboral", según recalca el departamento que dirige Isabel Celaá, donde las mujeres tienen peores tasas de empleabilidad en todos los niveles de formación entre los 25 y los 64 años.
En el informe, Celaá recuerda que fue el 8 de marzo de 1910 cuando se publicó una Real Orden del Ministerio de Instrucción Pública permitiendo por primera vez la matriculación de alumnas en todos los establecimientos docentes.
La ministra recalca que los avances producidos desde entonces "no nos pueden hacer olvidar los grandes retos que debemos afrontar".
En este sentido, afirma que estamos inmersos en la Cuarta Revolución Industrial, donde los mayores nichos de empleo, salario y productividad se encuentran en los sectores de las ciencias, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas y ahí, subraya, "tenemos que estar también las mujeres".