Granados ha afirmado ante el juez que en las elecciones autonómicas de 2007 y 2011se pagaron gastos de "refuerzo" de la campaña de Esperanza Aguirre con fondos de la Comunidad de Madrid, una "caja b" que comenzó dirigiendo Ignacio González y que conocía Cristina Cifuentes, quien ha anunciado una querella contra él.
Maíllo ha atribuido esta tipo de declaraciones a la "estrategia" de Granados que "se defiende como quiere, y cambia de opinión cuantas veces quiere", algo que tendrán que valorar los jueces.
Pero ha considerado que sus afirmaciones sobre Cifuentes, de quien ha dicho que tenía una relación muy estrecha con González, son injustas y se ha mostrado sorprendido de que ningún otro partido haya expresado su apoyo a la presidenta de Madrid ante una acusación que "puede ser que afecte o no a su vida personal" y por la que ella se va a querellar.
Para el PP estas afirmaciones de Granados son "bazofia pura" por lo que Cifuentes tiene "todo el apoyo y el cariño" del partido, ante una "acusación de carácter personal que no puede formar parte de la política de nuestro país", ha afirmado.
Sobre si el PP teme que Cifuentes pueda ser imputada en este caso y si eso afectaría a su posibilidad de ser candidata en las próximas elecciones autonómicas, Maíllo se ha limitado a reiterar el "apoyo total" del partido a la presidenta madrileña, algo que cree que ha quedado "bastante claro".
Por lo que respecta, a la petición de algunos grupos de la oposición para que Cifuentes comparezca en la Comisión de investigación sobre la presunta financiación irregular del PP, Maíllo ha manifestado que este tipo de comisiones cuando hay un procedimiento judicial abierto "están viciadas de origen y no sirven para saber la verdad, sino para dañar al contrario".
A su juicio, "no tienen ninguna utilidad" y los jueces están de acuerdo, porque "se perjudica el procedimiento judicial" y además afecta al derecho a la defensa del conjunto de las personas que forman parte del proceso.