El Ejecutivo ha hecho llegar esta tarde al registro de la Cámara el escrito con esa solicitud de comparecencia, que será tramitado mañana por la Mesa y la Junta de Portavoces del Congreso y que se concretará previsiblemente para la próxima semana.
El secretario de Estado de Relaciones con Las Cortes, José Luis Ayllón, ha informado a Efe de que no ha habido un cambio de criterio respecto a que el Ejecutivo en funciones no debe someterse al control de un Parlamento del que no tiene su confianza.
Pero ha precisado que Rajoy ha decidido comparecer de forma excepcional en una sesión informativa ante el pleno del Congreso por la trascendencia del asunto debatido en Bruselas.
"El presidente del Gobierno comparecerá ante la excepcionalidad de una cuestión de contenido político que se sale de lo ordinario", ha subrayado el secretario de Estado.
La excepcionalidad del asunto fue el argumento aducido también por el Gobierno para que antes de la cumbre de Bruselas compareciera en comisión el secretario de Estado para la Unión Europea para informar de la posición española en el Consejo.
Una comparecencia en la que los grupos parlamentarios consensuaron un texto con el mandato que debía llevar el jefe del Ejecutivo a esa reunión del Consejo Europeo y en el que se dejaba claro que no podría avalar ninguna decisión que no respetara el derecho internacional o que pretendiera la devolución colectiva de refugiados a Turquía.
Ayllón recalca el carácter excepcional de la comparecencia de Rajoy y reitera que no ha habido cambio de criterio alguno respecto a la posición que viene defendiendo el Gobierno de que no puede someterse al control de este Parlamento.
En ese sentido, explica que la comparecencia ante el pleno de la Cámara baja no puede interpretarse como de control al Gobierno, sino que es una sesión informativa aunque en ella asume que habrá un debate habitual con intervenciones de los representantes de los diversos grupos parlamentarios.
El Gobierno ha venido rechazando que Rajoy o sus ministros, al estar en funciones, acudan al Parlamento actual para someterse al control de los grupos y ha subrayado que eso nunca ha ocurrido en España desde la Transición.
Un criterio que es rechazado por todos los grupos parlamentarios, excepto el PP, y que han firmado una iniciativa para llevar al Gobierno en funciones al Tribunal Constitucional y plantear un conflicto de atribuciones ante su negativa a someterse al control parlamentario.
Una iniciativa presentada después de que el presidente de la Cámara, el socialista Patxi López, no lograra convencer al Ejecutivo de que reconsiderara su posición en una reunión que mantuvo con José Luis Ayllón.
El secretario de Estado insistió entonces en que un Gobierno sin la confianza parlamentaria no tiene la obligación de someterse al control, ni el Congreso tiene responsabilidad para exigir esa fiscalización, aunque sí reconoció que hay hechos de especial trascendencia, como la posición de España en la UE ante la crisis de los refugiados, sobre los que conviene informar, como, a su juicio, se hizo.
Antes de la petición de comparecencia de Rajoy registrada hoy, varios grupos habían pedido también que compareciera para informar del Consejo Europeo del 17 y 18 de marzo y esas solicitudes ya estaba previsto que se debatieran y votaran mañana en la reunión de la Junta de Portavoces.
El Gobierno ya había enviado también a los grupos el día 19 de marzo un texto con las conclusiones aprobadas en el Consejo Europeo y con las aportaciones españolas a ese documento para que se pudiera comprobar que Rajoy se atuvo durante las negociaciones de Bruselas al mandato del Congreso.