El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado este jueves que "está tranquilo" y no se ha planteado dimitir "en modo alguno" tras la presión que en las últimas han acrecentado los socios de Gobierno, de investidura y la oposición por la tragedia en la valla de Melilla.
"No me he planteado dimitir en modo alguno. Vuelvo a repetir que la Guardia Civil actuó en parámetros de legalidad, proporcionalidad y necesidad", ha manifestado en declaraciones a los periodistas antes de asistir a la toma de posesión de la nueva presidenta del Consejo de Estado, Magdalena Valerio.
El titular de Interior ha defendido su actuación: "Yo no me parapeto tampoco en la Guardia Civil porque yo soy el que da la orden de que todo ataque violento a la frontera española debe ser contrarrestado en parámetros de legalidad, proporcionalidady necesidad y en política basada en el respeto absoluto a los derechos humanos".
Cierre de filas entre los ministros socialistas
Los ministros socialistas han salido en tromba a expresar su apoyo a la actuación del titular de Interior. el último en hacerlo ha sido Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, quien con un escueto "sí" ha manifestado su respaldo a Marlaska.
Después le ha enviado un mensaje mucho más expresivo a la vicepresidenta Segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que ayer pedía explicaciones a su propio compañero Marlaska sobre lo ocurrido en la valla de Melilla, y le ha dicho que "todo el Gobierno en su conjunto, sin excepción, estamos comprometidos con los derechos humanos y con los valores democráticos".
En el Partido Popular no descartan ninguna iniciativa e insisten en pedir explicaciones al ministro y quieren respuestas del Presidente Sánchez, en lo que ha insistido la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra portavoz.