La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha comparecido en el Senado y ante la interpelación de la senadora del PP María Fernández por el error de cálculo en los trenes de Asturias y Cantabria, ha manifestado que es "la primera enfadada e indignada".
Sánchez ha reiterado su disculpas: "He dado la cara, he pedido disculpas, he reconocido el error y he depurado responsabilidades". El fallo de cálculo ya ha costado el cargo al gerente de Área de Gestión de Material de Renfe Viajeros en el momento de la gestación del proyecto y al titular de la jefatura de Inspección y Tecnología de vía de Adif.
"Me comprometo en acelerar todo lo posible la construcción de esos trenes", asegura la ministra, que ha recalcado que este error "no ha supuesto ni un euro de gasto público porque no se ha construido ningún tren". "Lo voy a intentar corregir de la manera más ágil posible", añadió.
A este respecto, explicó que su departamento ha encargado una auditoría interna a Renfe y Adif para depurar responsabilidades además de un grupo de trabajo que mañana mismo se desplazará a Cantabria para dar explicaciones. Por su parte, la senadora del PP cuestionó que sea suficiente echar a dos técnicos y denunció que pese a lo defendido por el Gobierno este error "cuesta tiempo y dinero", además de "indignación a los asturianos y cántabros".
Esta polémica ha surgido por el fallo de diseño de los trenes del contrato de renovación de la flota de ancho métrico para Asturias y Cantabria. Dicho fallo impediría que los trenes pasen por determinados túneles.