En el pleno del Congreso se ha llevado a votación la ley de la eutanasia, la cual ha obtenido 198 votos a favor, 138 en contra y dos abstenciones.
Sobre la nueva ley de la eutanasia que propone el Gobierno, el PP se ha pronunciado, ya que para ellos “la eutanasia y el suicidio asistido son una derrota para todos y un fracaso de nuestro sistema sanitario y de nuestra sociedad". A su vez, Vox ha querido afirmar que "instauran la industria de la muerte de forma totalitaria y sin debate social".
El militante del PP, Ignacio Echániz, ha acusado al Partido Socialista de aprobar esta norma "al final del último día, del último Pleno ordinario, para así poder llevarla a cabo "sin informes técnicos ni jurídicos", "sin audiencia pública", "sin estudios demoscópicos recientes" o "sin permitir las comparecencias de expertos", ya que para ellos se trata de una ley "injusta, inoportuna e inconstitucional".
Por otro lado, Lourdes Monasterio, miembro de Vox, poniendo voz al otro partido que se opone a dicha ley, afirma que se trata de una ley que representa la "traición despiadada, inhumana e ilegítima”.
Desde el PP, José Ignacio Echániz, apuesta por los cuidados paliativos frente a la eutanasia y asegura que si se otorga asistencia médica los candidatos al suicidio asistido "prácticamente desaparecen".
Echániz ha querido remarcar que el PSOE ha tomado esta decisión "en un momento en el que decenas de ancianos han perdido la vida solos", decido a la pandemia que azota el mundo.
A su vez, María José, diputada de Vox acusa al Ejecutivo de optar por la vía "más fácil y barata, como si la vida tuviera un precio".
Lourdes Monasterio ha añadido que, si la ley de la eutanasia sigue hacia delante, "recurriremos esta barbarie al Tribunal Constitucional".