MOCIÓN DE CENSURA APROBADA

El Parlament reafirma los "objetivos políticos" de la resolución independentista del 9N suspendida por el TC

La moción ha salido adelante con los votos a favor de JxCat, ERC y la CUP, los diputados de Cs, PSC y PP han rechazado votar y los Comuns se han abstenido.

ondacero.es

Madrid |

El Parlament reafirma los "objetivos políticos" de la resolución independestista | Twitter

El Parlament catalán ha aprobado la moción transaccionada entre JxCat, ERC y la CUP por la que la Cámara se reafirma en los objetivos políticos de la resolución independentista del 9 de noviembre de 2015 que el Tribunal Constitucional (TC) suspendió. La moción ha salido adelante con los votos a favor de JxCat, ERC y la CUP, con la abstención de los comuns y sin ningún voto más, ya que los diputados de Cs, PSC y PP no han votado. Antes de comenzar el debate, el presidente de la Cámara, Roger Torrent, ha pedido leer una nota que le habían enviado los letrados del Parlament en que recomiendan "no tramitar la moción" por ir contra las resoluciones del TC, motivo por el que PP, PSC y CS no han votado y estos últimos han escenificado su protesta levantando las manos.

La moción la había presentado la CUP y, después de una negociación, se adhirieron JxCat y ERC tras modificar el redactado: en la original los 'cupaires' pedían una reafirmación de la Cámara en los objetivos de la resolución independentista, mientras que en la definitiva se concreta que la reafirmación es sobre los "objetivos políticos" de la misma. Cuando se presentó el original, Cs, PP y PSC pidieron a la Mesa con mayoría independentista reconsiderar la aceptación a trámite de la moción por considerar que iba contra las resoluciones del TC y de la obligación encomendada por el Tribunal a la Mesa de impedir toda iniciativa que desatendiera las resoluciones judiciales y desarrollara el proyecto independentista. Una vez transaccionada, los letrados han advertido en su nota a Torrent que la transacción "no resuelve" la contradicción que supone el trámite de la moción con las resoluciones judiciales del TC, pero el presidente ha dado continuidad a la sesión, se ha debatido, votado y ha sido aprobada.

Los comuns han aceptado su debate y votación porque defienden que se puedan abordar en el pleno todas las cuestiones, aunque la portavoz del grupo, Elisenda Alamany, ha justificado su abstención por creer en los grandes consensos y no en "mociones y proclamaciones simbólicas". Sergi Sabrià (ERC), cuyo grupo ha votado a favor, también ha sido crítico con el simbolismo que ve en la moción: "Hacemos un gesto simbólico poco efectivo. Es la hora de dejarnos de gestos simbólicos y hacer lo que nos permita sumar ya avanzar. Hoy nos dirigimos a los convencidos y no a los que hay que convencer".

El encargado de abordar la moción de JxCat ha sido el vicepresidente del Parlament, Josep Costa, que defendido que Cataluña está en un proceso hacia la independencia, que ve poco margen al nuevo Gobierno de Pedro Sánchez con el TC, pero que ha respaldado la reunión que mantendrá con Quim Torra: "Todo el apoyo a Torra para negociar de todo y con todos, pero no desfalleceremos ni nos rendiremos". Vidal Aragonés (CUP) ha pedido a ERC dejar de hablar de gestos simbólicos, y a JxCat le ha reprochado que "si tiene claro que el TC no cambiará, lo que encontrarán en la reunión con Sánchez no será diálogo, sino una transformación del monólogo".

El popular Xavier García Albiol ha puesto el acento en la reafirmación de los independentistas en su proyecto de un Estado mientras el Gobierno se abre el diálogo: "Mientras el Gobierno está cediendo, se quiere gustar ante los independentistas, la respuesta del independentismo es esta moción que nos traen". El socialista Ferran Pedret ha afirmado que no hay mayoría social para conseguir la independencia, que lo que defiende la moción es la vía unilateral que no ha funcionado en los últimos meses y que apuesta "por una república de adhesión que no ha conseguido adhesiones". Carlos Carrizosa (Cs) ha avisado de que esta aprobación puede venir una nueva resolución de institucionalidad del TC, que su aprobación señala a la nueva Mesa, y ha exigido a Costa no aleccionar sobre democracia cuando "forma parte de una mesa que permite resoluciones ilegales".