El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, han plantado este domingo al rey Felipe VI en el saludo protocolario en la cena de bienvenida a las autoridades en el Mobile World Congress. Ambos se han ausentado de la foto de familia.
Es la tercera vez que Aragonès rechaza participar en el recibimiento a Felipe VI como gesto de rechazo a la monarquía. Tanto él como Colau han accedido al congreso por una puerta diferente a donde aguardaban las autoridades la llegada del rey, a quien sí han recibido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta primera, Nadia Calviño.
Está previsto que Aragonés y Colau saluden a Felipe VI antes de la cena, en la que compartirán mesa junto a los miembros del Gobierno presentes en el MWC. Ambos tomarán la palabra antes del inicio de la cena, al igual que el rey y Pedro Sánchez. Este lunes volverán a coincidir en la inauguración oficial del Congreso en L'Hospitalet de Llobregat.
La entidad independentista Asamblea Nacional Catalana ha convocado este domingo una concentración en contra de la presencia del rey que, según la Guardia Urbana, ha reunido en Plaza España a un centenar de personas.
Felipe VI: "Donde hay un móvil, hay esperanza, oportunidad y ayuda"
Felipe VI ha abierto este domingo el Mobile World Congress en Barcelona destacando el papel de las nuevas tecnologías, especialmente para para personas afectadas por guerras o desastres naturales, a las que les permiten estar conectadas y unidas.
"Todos hemos podido ver cómo nos permitió mantenernos conectados y unidos con las personas más vulnerables en áreas afectadas por conflictos y desastres naturales. Donde quiere que haya un dispositivo móvil conectado hay esperanza, hay oportunidad, hay ayuda", ha declarado Felipe VI.
El rey ha destacado que el mayor encuentro tecnológico del mundo "se identifica bien" con Barcelona, donde se celebra desde hace diecisiete años, y ha aportado a España y a la capital catalana "mucho más que el valor que aporta la feria en sí".