Los graves disturbios durante las manifestaciones de este fin de semana en varias ciudades españolas han dejado más de 60 detenidos y una veintena de heridas, entre ellos, 11 agentes de policía. Los incidentes más violentos se han producido en Madrid y se han saldado con un total de 32 detenidos y 12 personas heridas.
Durante la madrugada de este domingo se han observado escenas de carreras, lanzamientos de objetos y mobiliario público e incluso saqueos en algunos puntos.
Políticos de toda índole han reaccionado a estas conductas condenando de manera unánime la violencia ejercida contra las Fuerzas de Seguridad y el mobiliario urbano. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido uno de los primeros en pronunciarse.
"La conducta violenta e irracional de grupos minoritarios es intolerable. No es el camino", condenaba el presidente del Gobierno en su cuenta de Twitter. De la misma forma reaccionaba el ministro de Sanidad, Salvador Illa, quien ha querido recordar que no es el momento de "relajar medidas": "La conducta de grupos minoritarios es inaceptable".
El líder del PP, Pablo Casado, ha mostrado su apoyo a las Fuerzas de Seguridad y ha agradecido la "responsabilidad" de la mayoría de los españoles. También del PP, José Luis Martínez Almeida ha condenado los actos violentos de las protestas y ha pedido a los jóvenes que cumplan el toque de responsabilidad, porque "además de obligatorio es lo legal".
Por último, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, también se ha sumado a la condena de la violencia en las manifestaciones de esta madrugada y, al igual que Pablo Casado, ha querido agradecer la labor de las Fuerzas de Seguridad del Estado así como la responsabilidad y el "civismo" de la mayoría de los españoles.