Una reunión suspendida, dos duros comunicados de las presidencias del CGPJ y del Supremo y la evidencia del in crescendo en el desasosiego de los jueces. La intervención en sede parlamentaria de la portavoz de Junts Miriam Nogueras ha producido un temblor de tierras hoy en el tribunal que juzgó el procès hasta el punto de provocar la suspensión del encuentro con el ministro Bolaños por parte del presidente en funciones del órgano, Francisco Marín Castán, que ha alegado oficialmente “razones sobrevenidas”.
Sin embargo, fuentes jurídicas confirman a Onda Cero que detrás de los motivos subyace el profundo malestar por los insultos de Nogueras quien acusó a los jueces del 1-O de indecentes y propuso juzgarles, señalando con nombres y apellidos al ex presidente del Supremo Carlos Lesmes, al presidente de la Sala de lo Penal Manuel Marchena y a los magistrados de este órgano Pablo Llarena, instructor de la causa del procès, y Carmen Lamela. “En un país normal serían cesados y juzgados de inmediato”, aseguró la portavoz de Junts durante el debate de la toma en consideración de la Ley de la amnistía en el Congreso de los diputados.
“El ataque personal en el Parlamento al anterior presidente del Tribunal Supremo, a un presidente de Sala y a dos magistrados del tribunal carece de precedentes y no se corresponde con los requisitos mínimos de la separación de poderes en un Estado de Derecho”, señala el comunicado que firma el presidente en funciones Marín Castán.
Se adoptarán las medidas necesarias para proteger su independencia
En esa misma línea el presidente suplente del CGPJ, Vicente Guilarte se ha apresurado a responder públicamente no solo a las descalificaciones sino lo que esos insultos comportan: “El señalamiento -y la finalidad que de él se desprende- de varios magistrados del Tribunal Supremo resulta inadmisible en un Estado de Derecho, uno de cuyos principios fundamentales es la separación de poderes”.
Guilarte brinda su apoyo y el de la institución que preside a las personas señaladas y a cualquier otro miembro de la Carrera Judicial que pueda encontrarse en las mismas circunstancias.
“Encontrarán en la institución que presido la más firme oposición a estos ataques en defensa de la labor jurisdiccional realizada por todos ellos, a los que manifiesto mi apoyo expreso y la garantía de que, en el ejercicio de las competencias que la ley atribuye al CGPJ, se adoptarán todas las medidas necesarias previstas por el ordenamiento jurídico para proteger su independencia”, concluye el comunicado.
Reunión con Bolaños
Tras conocer que Marín Castán suspendía el encuentro previsto para hoy por “razones sobrevenidas”, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las cortes se ha apresurado a llamarle por teléfono al finalizar su intervención en la sesión de Control del Congreso y ambos han acordado una nueva fecha para la reunión, que se celebrará finalmente el 19 de diciembre en la sede del Tribunal Supremo.
Según fuentes del Ministerio, Bolaños le ha trasladado la defensa pública de los jueces que viene subrayando en sus intervenciones desde que Nogueras se descolgó con los insultos a los magistrados del procès. El ministro ha insistido en que "los jueces actúan con independencia y separación de poderes" y en que trabajará por el prestigio de los jueces y magistrados en este país "ante cualquier ataque, venga de donde venga".
En este sentido, al finalizar su intervención hoy en el Congreso y preguntado por los periodistas acerca de la suspensión de la reunión, Bolaños ha subrayado que defenderá a los jueces de los ataques de los partidos independentistas, pero también de la larguísima mano del PP, que siempre trata de influir en el poder judicial.
Las fuentes del Ministerio consultadas insisten en que Bolaños defenderá a los jueces de “cualquier descalificación y cuestionamiento de su prestigio y para garantizarles que puedan impartir justicia con independencia, en el marco de la Constitución, el Estado de derecho y la separación de poderes”.
