Puigdemont garantiza a los cónsules que hará el referéndum: "Superaremos las amenazas"
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha garantizado este miércoles a los cónsules acreditados en Barcelona que convocará un referéndum de independencia en septiembre de 2017 como muy tarde, con o sin el permiso del Estado: "Superaremos las amenazas".
Así lo ha expuesto en la recepción anual de la Generalitat al cuerpo consular acreditado en Barcelona, un acto que el presidente ha aprovechado para asegurar que el referéndum se hará con "todas las garantías jurídicas y democráticas" y cumpliendo los estándares internacionales.
También ha reiterado que la prioridad del Govern siempre ha sido pactar este referéndum con el Estado, y ha criticado la "obstinación cerrada" del Gobierno central a reconocer esta votación y a querer sentarse con el Ejecutivo catalán para negociarla.
Haciendo un juego de palabras con la palabra 'unilateral', ha dicho que la Generalitat busca el diálogo permanente con el Gobierno central pero éste responde con una "negativa unilateral".
Ha insistido en que el 80% de catalanes avalan un referéndum sobre la independencia y que la negativa del Gobierno central no hará mella en ellos: "No nos va a desmovilizar. Las amenazas no nos harán replantear a millones de catalanes que quieren una urna".
No ha dicho si contempla avanzar el referéndum, como están debatiendo los partidos soberanistas, pero ha garantizado que la votación será como "muy tarde" en septiembre de 2017, como figura en la resolución aprobada el Parlament.
Puigdemont ha dedicado la primera parte de su discurso a ensalzar datos de la economía catalana, siempre en comparación con la toda España; por ejemplo, que el paro en Cataluña está "casi cuatro puntos" por debajo de la media española.
Ha dicho que Cataluña es líder en España en crear empresas, en empresas exportadoras, en captar inversiones y en captar fondos para la investigación, y ha advertido de que nadie podrá "encerrar en sus fronteras" a los catalanes porque tienen una vocación internacional.
Además, ha defendido que Cataluña tiene una economía similar a la de Suiza, Dinamarca y Austria, y que Barcelona es la tercera ciudad del mundo que no es capital de Estado --"por ahora"-- con más cónsules tras Nueva York y Hong Kong.
También ha tomado la palabra la decana del cuerpo consular en Barcelona y cónsul de Perú, Franca Lorella Deza, que ha agradecido el apoyo de las instituciones para sus múltiples intereses y ha definido Cataluña como puntera en investigación y tecnología.
"En la medida que a todos los ciudadanos de Cataluña les vaya bien, a nuestro representados les irá bien. Nuestros deseos de bienestar y prosperidad", y ha destacado el carácter acogedor de los catalanes.
El encargado de abrir el acto ha sido el conseller de Asuntos Exteriores, Raûl Romeva, que también ha abordado el referéndum, y ha reivindicado que lidera la primera conselleria de Exteriores de la historia de la Generalitat: "La experiencia es positiva", ha dicho ante una sesentena de cónsules.