El Arzobispado de Valencia celebra en la tarde de este lunes una misa funeral en la Catedral por las víctimas de la DANA del pasado 29 de octubre. A la misma acudirán 400 familiares, mientras que otros afectados aseguran que nadie se ha puesto en contacto con ellos para un acto al que también acudirán los reyes Felipe VI y Letizia, Carlos Mazón y distintos presidentes autonómicos, como Isabel Díaz Ayuso.
Por otro lado, el Gobierno ha delegado su representación en la misa funeral en la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, y la delegada del Ejecutivo en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé.
No estará Pedro Sánchez y su ausencia ha suscitado polémica. El presidente del Gobierno no ha acudido a Valencia desde que ocurrieran los incidentes en Paiporta, cuando algunos de los presentes lanzaron barro y objetos a la comitiva en la que se encontraban el presidente, los monarcas y Mazón.
Qué es un funeral de Estado: ¿tendría que asistir Pedro Sánchez?
Así, la ausencia de Sánchez ha puesto el foco en el Ejecutivo y en el propio presidente. En primer lugar, no se trata de un funeral de Estado, sino de una convocatoria del Arzobispado de Valencia para la celebración de una misa funeral por las víctimas del temporal en la región.
Según Protocolo, un funeral de Estado es una ceremonia fúnebre que se celebra cuando muere un jefe de Estado o de Gobierno, o bien una figura de gran relevancia del país. Por tanto, se trata de una misa celebrada a petición de la Jefatura del Estado o de la propia Presidencia del Gobierno.
El último que se dio en España fue el del expresidente Adolfo Suárez, mientras que la misa celebrada por las víctimas del Covid en 2020 también sucedió a consecuencia de una convocatoria de la Conferencia Episcopal en la Catedral de la Almudena de Madrid. El Ejecutivo realizó después otro homenaje sin carácter religioso en memoria de los fallecidos en la pandemia.
En un funeral de Estado, al ser convocado por el propio Gobierno, acudiría el propio presidente del Ejecutivo, junto con todos los representantes del mismo. Lo que ocurre en este caso es que no es correcto hablar de 'funeral de Estado', por lo que los invitados a esta misma en Valencia serán los definidos por el propio Gobierno.