El presidente del Gobierno ha subrayado que el referéndumes "una grave amenaza para la convivencia" y que no está dispuesto a participar en "una negociación a espaldas de los verdaderos cauces democráticos y de la ley".
Además, ha insistido en su voluntad "plena y sincera" de dialogar y de llegar a acuerdos con la Generalitat de Cataluña, "como con cualquier otro gobierno autonómico".