En plenas negociaciones para la formación de Gobierno, Rajoy se expresa así en un artículo en el diario 'El País', con motivo del segundo aniversario del encarcelamiento del opositor venezolano Leopoldo López, y el primero del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma.
"Podemos tener un autoproclamado candidato a vicepresidente del Gobierno que no condenó la represión y el encarcelamiento de manifestantes pacíficos, estudiantes y líderes de la oposición en Venezuela?", se pregunta Rajoy sobre Iglesias y añade si el PSOE puede plantearse pactar con "quien cuando era eurodiputado, votó en contra de la resolución del Parlamento Europeo que pedía la liberación de líderes demócratas como Leopoldo López". Pero además, recuerda a Iglesias que en el pasado dijo sentir "envidia de los españoles que viven en Venezuela".
En el texto, titulado 'Siempre con la libertad', Rajoy avisa de que, aún peor que los datos que arroja la economía venezolana es "la crisis de valores". Y dibuja un escenario en el que "se empieza cambiando la cultura del esfuerzo" y "las autoridades afirman que también robarían por necesidad y manifiestan su comprensión por los delitos comunes".
Después, prosigue, "se subsidia a la población para crear un electorado anestesiado, agradecido y estable, a disposición del poder político" y "con una nueva ley electoral hecha a medida, el letargo puede durar 15 años, hasta que la juventud se rebela" y rechaza "el engaño de quienes llegaron al poder centrando su discurso en la demolición del sistema político y en el resentimiento social, apropiándose del sufrimiento de los débiles y prometiendo todo lo imposible".
Rajoy subraya que tanto Leopoldo López como Antonio Ledezma están en la cárcel "por hacer política y defender la libertad" y recuerda que al alcalde de Caracas lo detuvo "el Servicio Bolivariano de Inteligencia, es decir, el CNI venezolano" y fue acusado de conspiración "sin mayores pruebas".
En su texto, el líder del PP emplaza al lector a "imaginar" por un minuto que esa situación se diese en España, que hubiese un dirigente democrático en una prisión militar o que no hubiese medios de comunicación independientes, por tener que "venderse al grupos afines al régimen" o estar obligados a cerrar porque el Gobierno les corta el suministro de papel.
"Pues bien, ese escenario implanteable es el que se da un país amigo y hermano como Venezuela", prosigue. Por todo ello, Rajoy expresa su apoyo "sin reservas" a la Ley de Amnistía que está impulsando la Asamblea Nacional de Venezuela y llama a denunciar "con claridad a los responsables y a los cómplices de estos atropellos a la libertad".
Además, transmite su apoyo y solidaridad a las esposas y familiares de los presos políticos y subraya que el Gobierno de España tiene que estar siempre con la libertad, porque "la política exterior de un demócrata antepone los valores a los intereses".
Por eso, asegura que su Gobierno siempre ha protegido a los venezolanos perseguidos, otorgando la nacionalidad o la residencia en algunos casos.
"Yo hoy quiero repetirles que el Gobierno de España y el partido que represento no dejarán de acompañarles ni en este aniversario ni nunca. Porque queremos para los venezolanos lo mismo que los españoles disfrutamos cada día: democracia, libertad y seguridad", concluye el texto.
