Tanto Rato como Aza, quienes prevén declarar por videoconferencia, ya comparecieron ante la Policía en el marco de esta causa en relación a una reunión que habría tenido lugar en el Palacio de la Zarzuela entre Iñaki Urdangarin, su exsocio Diego Torres, el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, a fin de negociar la organización de los denominados Valencia Summit.
En su interrogatorio, Aza aseguró no recordar ningún encuentro con las autoridades valencianas en el que se abordasen aspectos en torno al Valencia Summit, una reunión que, sin embargo, el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, sitúa el 29 de enero de 2004, casi nueve meses antes de que fuese firmado el convenio -8 de septiembre- por el que el Instituto Nóos se hizo con la organización del evento deportivo.
Por su parte, Rato, quien ese día habría estado presente en un almuerzo previo en Zarzuela, también fue inquirido al respecto por los agentes, quienes acudieron a su despacho para interrogarle, si bien se llevaron consigo las mismas respuestas obtenidas que en el caso de la declaración de Aza. El exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) manifestó desconocer que el encuentro con Camps y Barberá hubiera tenido lugar.
También está prevista la comparecencia del exempleado de Nóos Consultoría Estratégica Juan Lerma -quien debía comparecer este martes-, así como de los también testigos Gemma Giraldez, Maite Zazo, Marta Dinarés, Roger Olivares, Alejandro Suja y Chantal Stephanie.
En lo que a Sorribas se refiere, el supuesto 'hombre de paja' de Urdangarin ha subrayado ante el tribunal encargado de juzgar el caso Nóos que, cuando estuvo vinculado a los negocios del exduque y del exsocio de éste Diego Torres, "si recibía cinco órdenes, cuatro eran de Torres y una de Urdangarin".
Sorribas, quien estuvo imputado durante la instrucción de la causa, ha sido inquirido por su papel al frente de la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FDCIS), considerada sucesora del Instituto Nóos, y en este sentido ha recordado que fue Torres quien le pidió figurar en la entidad en lugar de Urdangarin, puesto que éste "arrastraba una reputación negativa que no podía contaminar la imagen de la Fundación, por lo que consideró que mejor no tuviera en ella una presencia destacada".
Del mismo modo, este martes ha sido interrogado Carlos Masiá, notario que intervino en la constitución de Aizoon -de la que son copropietarios a partes iguales Urdangarin y su mujer, la Infanta Cristina-. Durante su declaración, el testigo ha confirmado que desaconsejó "totalmente" que la Infanta figurase en la mercantil por su "alta función representativa" y ante las posibles "vicisitudes" e "infortunios importantes" a las que estaba expuesta la empresa.
Tal y como ha subrayado en su comparecencia, dio "soluciones alternativas" al exasesor fiscal del matrimonio Miguel Tejeiro cuando éste le pidió consejo al respecto, si bien, ha recordado, aquél "puso resistencias" y finalmente no llamó a Urdangarin para trasladarle los inconvenientes que podían surgir.
La declaración de Masiá ha arrancado tras la prestada por el propio Tejeiro, quien ha negado haber respondido al notario, a la hora de crear Aizoon, que no habría problemas por el hecho de que la Infanta participase en la mercantil puesto que ésta constituiría un 'escudo fiscal' ante Hacienda. Tejeiro ha desmentido así las afirmaciones efectuadas por Masiá durante la instrucción de la causa.
Sobre esto, Masiá ha recordado que Tejeiro "insistió mucho en poner primero el documento de identidad de Doña Cristina" y, según ha apuntado, "me dio a entender que la Infanta podría ser un escudo". No obstante, al ser advertido de la contradicción que esto supondría con lo que declaró ante el juez José Castro en el sentido de que, efectivamente, las palabras de Tejeiro fueron literales, ha precisado que "estamos hablando de 2003, he tenido buena memoria como opositor pero no recuerdo todo".