El rey Felipe VI recibe este jueves en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) a los últimos 24 militares destacados en Afganistán, país del que España se retira después de 19 años dejando tras de sí un centenar de fallecidos en la operación militar más larga en la que ha participado.
Está previsto que el rey, acompañado del presidente Pedro Sánchez y la ministra de Defensa, Margarita Robles, reciban a las siete de la tarde a los 24 militares, acompañados de dos intérpretes locales, y rindan además tributo a los caídos, en un acto que cierra una misión en la que han participado alrededor de 27.000 efectivos españoles a lo largo de casi veinte años.
Cronología de la misión
Los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos llevaron a este país a poner en marcha la operación Libertad Duradera en Afganistán para luchar contra Al Qaeda y los talibanes, a la que se añadió la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) aprobada por la ONU.
La participación de España se aprobó en el Consejo de Ministros del 27 de diciembre de 2001, con un máximo de 485 militares y por un periodo de tres meses, pero se fue prorrogando hasta la actualidad.
En enero de 2002 llegaron los primeros 350 españoles a Kabul, en agosto de 2003 la OTAN asumió el mando de la ISAF y dos años después España asumió el mando de la base de la localidad de Herat, al oeste del país, y se hizo cargo del equipo de reconstrucción provincial en la cercana Qala-i-Naw, donde estableció una base.
La mayor aportación de España a la ISAF se alcanzó en 2010, tras la aprobación por el Congreso de un despliegue máximo de 1.549 efectivos. En 2011, la OTAN comenzó a traspasar la seguridad del país a las fuerzas afganas
La ISAF finalizó el 31 de diciembre de 2015 y un día después se estableció una nueva misión de la Alianza Atlántica, "Resolute Support" (Apoyo Decidido), enfocada al adiestramiento y asesoramiento de las fuerzas afganas.
El grueso de las tropas españolas salió del país la última semana de octubre de 2015 y permanecieron 95 militares, que redujeron su número a 24 durante la pandemia.
Estos efectivos estaban desde 2018 bajo el Mando de Operaciones Especiales y se dedicaban a adiestrar a los afganos en este tipo de operaciones y a prestar protección y seguridad al personal desplegado.
100 militares han perdido la vida en esta misión
A lo largo de los 19 años de misión, 100 militares (entre ellos dos guardias civiles), 2 policías nacionales y dos intérpretes que trabajaban para los efectivos españoles han fallecido en el país asiático.
La de Afganistán es así la operación que más vidas ha costado a las Fuerzas Armadas españolas, de los alrededor de 180 militares muertos en operaciones internacionales, seguida de la de Bosnia-Herzegovina, con 23 muertos.
Entre ellos se cuentan los 62 fallecidos en el mayor siniestro de la historia de las Fuerzas Armadas, el del avión Yakovlev-42, que se estrelló en Turquía con ellos a bordo regresando de Afganistán. En 2005 murieron otros 17 cerca de Herat al estrellarse el helicóptero en el que viajaban.
Las fuerzas españolas han sufrido a lo largo de estos años al menos 79 ataques e incidentes armados (el primero en 2006 y el último en 2013) y muchos de los fallecidos lo fueron por explosiones de artefactos y minas al paso de convoyes.
La salida de Afganistán se enmarca dentro de la retirada total del país asiático anunciada por Estados Unidos, cuya última fase ha comenzado este 1 de mayo y se completará el próximo 11 de septiembre, con motivo del 20 aniversario de los atentados de Al Qaeda.
Las tropas se retirarán sin embargo del país sin haber evitado que la organización terrorista suponga una amenaza y tanto el Gobierno afgano como la comunidad internacional han advertido de que el grupo yihadista podría aumentar su presencia cuando Estados Unidos y sus aliados salgan.
La violencia sigue presente en el país, donde el pasado sábado murieron 85 personas, en su mayoría niñas, en un ataque terrorista sin reivindicar contra una escuela femenina de Kabul.