La portavoz ha expresado su "apoyo" a Iglesias y Montero, que -ha dicho- "están sufriendo una operación de acoso y derribo y una intromisión en su vida personal, algo intolerable y sin precedentes".
Ruiz-Huerta, sin embargo, ha afirmado que no le parece acertada la decisión de consultar a los inscritos (en Podemos) sobre algo que sólo afecta a la vida privada de la pareja Montero-Iglesias, "porque las consecuencias buenas o malas de su decisión se convierten en un asunto político".
Aunque sí ha considerado Lorena Ruíz-Huerta que "hubiese sido positivo someter a consulta un código ético en el que se volviese a valorar la cuestión de las limitaciones de salarios o de los estilos de vida que debemos tener los dirigentes de Podemos".