Este fue increpado especialmente en 2009 y 2010, hasta el punto de que su Gobierno intentó pactar un protocolo contra los abucheos, aunque sin éxito.
En una conversación informal con periodistas, durante la recepción ofrecida por los reyes en el Palacio Real, Sánchez ha bromeado de esta forma después de haber sido abucheado al inicio y al final del desfile y haber escuchado gritos de "okupa" y peticiones de que convoque ya elecciones generales.