El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras su reunión con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha confirmado el compromiso de España de aumentar el gasto en defensa hasta el 2% y ha puesto como fecha límite el año 2029.
Para alcanzar este gasto, la exigencia del jefe del Ejecutivo es que no afecte a las financiación de las políticas sociales, como sugería Rutte. Por lo que Sánchez ha propuesto un nuevo fondo europeo, a semejanza del Next Generation acordado para responder a la pandemia, según han informado fuentes socialistas desde Bruselas.
Esta reunión se ha producido días antes de que los 27 miembros de la UE se reúnan el próximo 3 de febrero para abordar el debate estratégico sobre el papel de la Unión Europea en materia de Defensa.
Pedro Sánchez y Mark Rutte se han reunido esta semana
En un comunicado emitido por la Moncloa, Sánchez y Rutte han abordado cuestiones geopolíticas "de interés como el gasto en Defensa y el firme apoyo a Ucrania", a la vez que el presidente del Gobierno ha recordado que el gasto en esta materia en España ha aumentado un 70% en la última década.
El compromiso de aumentar el gasto en defensa al 2% lo cumplen actualmente 23 de los 32 miembros de la OTAN. España es uno de los países que no llega a ese porcentaje y, además, se sitúa a la cola de la Alianza Atlántica, ya que su gasto es de 1,29%.
Fuentes de Moncloa han asegurado mostrarse "de acuerdo con invertir más, pero hay que discernir también a quién se compra". El secretario general, por su parte, ha asegurado en su perfil de X que nuestro país "juega un papel importante" en materia de seguridad.
19 países piden al BEI más financiación
Para impulsar esto, Sánchez se ha sumado a un frente común con 18 países de la UE para solicitar al Banco de Inversión Europeo (BEI), presidido por la exvicepresidenta Nadia Calviño, más financiación y que se explore la posibilidad de emitir deuda, ante la "crucial necesidad" de reforzar la base industrial comunitaria. Aun así, creen que esto debería considerarse en consulta con los mercados financieros y las agencias de calificación en cuanto a la viabilidad de esta posibilidad, de cara a garantizar “la financiación más eficaz y rentable posible”.
“El BEI debe seguir explorando nuevas vías para desempeñar un papel aún más destacado en la financiación de inversiones y el apalancamiento de financiación privada para el sector de la seguridad y la defensa”, han manifestado en la misiva.
La carta ha sido firmada por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y los dirigentes de Finlandia, Bélgica, Croacia, Chipre, Chequia, Dinamarca, Estonia, Francia, Grecia, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, los Países Bajos, Rumanía, Eslovaquia y Suecia.
En mayo, el BEI eliminó el requisito que establecía que para invertir en defensa había que financiar una tecnología de uso dual (civil y militar) y que el proyecto obtuviera más del 50% de sus futuro ingresos de uso civil. Ahora, los firmantes piden que el BEI revise las actividades y sectores excluidos de financiación, que defina con "mayor precisión" la terminología y el contenido de las actividades excluidas, así como ajustar la política de préstamos para aumentar el volumen de financiación disponible.
El lunes se reúnen los 27 miembros de la UE para hablar sobre defensa
El próximo lunes 3 de febrero, los 27 miembros de la UE se reúnen en una cumbre informal enfocada en Defensa para cubrir las necesidades en materia militar. También asistirá el primer ministro británico, Keir Starmer, y el secretario general de la OTAN.
El objetivo de esta cumbre es alcanzar un enfoque común sobre las carencias de la UE en capacidades militares, pero todavía no hablar sobre cifras o proyectos concretos, ya que eso llegaría en una fase posterior.
