El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respondido con contundencia a las recientes declaraciones de Víctor de Aldama, el empresario vinculado al caso Koldo, calificándolas de "mentiras" y desestimando su credibilidad. Tras la votación de la reforma fiscal, a la que el presidente ha acudido presencialmente por sorpresa, ha asegurado que las afirmaciones de Aldama son falsas y forman parte de una estrategia de defensa basada en la manipulación.
"Menuda inventada; la estrategia de defensa de este personaje es la mentira", ha aseverado el jefe del Ejecutivo, quien insiste en que "las declaraciones de un presunto delincuente no merecen crédito ninguno".
Sánchez fue categórico al desmentir cada una de las acusaciones realizadas por Aldama, señalando que su Gobierno mantiene un compromiso claro con la transparencia y la lucha contra la corrupción. "Mi gobierno es un Gobierno limpio, nacido para acabar con la corrupción sistémica de quienes están en la calle Génova, en una sede pagada en negro".
El presidente también ha subrayado que corresponde a Aldama demostrar las acusaciones que ha planteado, calificándolas como infundadas y sin pruebas. "Tendrá que ser el señor Aldama quien pruebe esas insinuaciones y acusaciones. Todo lo que ha dicho este señor es categóricamente falso", ha asegurado con firmeza.
Con estas palabras, Sánchez ha buscado minimizar el impacto de las revelaciones de Aldama, subrayando la falta de credibilidad del empresario y reafirmando su confianza en la integridad de su Gobierno frente a lo que considera una "inventada" diseñada para desviar la atención y desacreditar al Ejecutivo.
La declaración de Aldama
El presunto conseguidor del 'caso Koldo', Víctor de Aldama, le ha contado al juez detalles sobre la foto tomada junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto de presentación electoral y, según fuentes presentes en la declaración, dice que Sánchez quería verle, que le dio las gracias por lo que estaba haciendo.
"Me tienen informado de lo que haces y te doy las gracias", dice Aldama que le dijo el presidente del Gobierno.
Aldama ha explicado que, de los beneficios obtenidos en operaciones como la venta de mascarillas durante la pandemia, tuvo que repartir cantidades significativas entre figuras de la trama. Aseguró haber destinado 250.000 euros a José Luis Ábalos y otros 10.000 euros a Koldo García, el asesor de confianza del exministro de Transportes. Pero no fue lo único: según Aldama, las peticiones de dinero iban más allá de las mascarillas.
Según su testimonio, la relación con los socialistas estaba marcada por las exigencias constantes. Señala que Koldo le solicitó 50.000 euros adicionales para el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, tras la cual pronunció la frase. Sin embargo, no ha confirmado si esa transacción se llegó a realizar.
Aparte de las comisiones directas, Aldama ha mencionado otros pagos en "especies". Entre estos bienes se incluyen, supuestamente, el chalet de Ábalos, un piso para su expareja Jésica, y el financiamiento de relaciones extramatrimoniales.