El fallo de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra, contra el que cabe recurso, ha contado con el voto discrepante de uno de los magistrados, Ricardo González, quien ha abogado por la absolución de los cinco jóvenes de los delitos de los que se les acusaba, agresión sexual, contra la intimidad y robo con intimidación.
Se les condena además de a 9 años de prisión al pago de un tercio de las costas procesales, se les impone una orden de alejamiento y prohibición de comunicación con la víctima por 15 años, y se les obliga a indemnizarle conjunta y solidariamente con 50.000 euros, mientras que deberán pagar 1.531 euros al Servicio Navarro de Salud por la atención sanitaria a la chica.
También les condena a cinco años de libertad vigilada que cumplirán tras la pena privativa de libertad, de la que se descuenta el tiempo ya internados en la cárcel, donde llevan desde julio de 2016.
Además a uno de los acusados, Antonio Manuel Guerrero, se le condena por un delito leve de hurto, por quedarse con el teléfono móvil de la chica, por lo que deberá pagar una multa de 900 euros.
Los cinco acusados, José Ángel Prenda, Jesús Escudero, Ángel Boza, el militar Alfonso Jesús Cabezuelo y el guardia civil Antonio Manuel Guerrero, en prisión desde julio de 2016, no han asistido a la lectura del fallo realizada en audiencia pública por el presidente del tribunal, José Francisco Cobo.
El juicio tuvo lugar el pasado mes de noviembre y se celebró a puerta cerrada salvo las dos ultimas jornadas, dedicadas a las conclusiones de las acusaciones y las defensas, que en este último caso solicitaron la absolución de sus clientes, que a su vez se habían declarado inocentes.
Por su parte, la fiscalía pidió para cada acusado una pena de 22 años y diez meses de prisión, la acusación particular reclamó 24 años y nueve meses, y las acusaciones populares ejercidas por el Ayuntamiento de Pamplona y la Comunidad foral de Navarra pidieron 25 años y nueve meses de prisión.