En las filas de Sumar cobra fuerza como opción más lógica que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se decante por la vía de la cuestión de confianza tras su periodo de reflexión para decidir si continúa en el cargo. No obstante, apelan también al fortalecimiento del Ejecutivo como objetivo para superar este trance.
Diversas fuentes del socio minoritario de la coalición opinan, desde la prudencia, que el Jefe del Ejecutivo se inclinará al final por descartar su dimisión o convocar elecciones anticipadas, ni tampoco creen que ceda el testigo en otro cargo del PSOE.
A su vez, destacan que este trance debe tener un desenlace positivo, al concienciar sobre la necesidad de robustecer el bloque de investidura en el Congreso, con aliados progresistas y del espectro plurinacional.
Así, hay dirigentes del socio minoritario de la coalición que transmiten calma y conjeturan que cuando uno quiere dejar el cargo, lo anuncia o lo medita internamente, pero no lo hace por plazos.
Por tanto, lo más razonable sería confirmar su continuidad como presidente y pedir someterse a una cuestión de confianza, para reforzar apoyos visto la posición de varios de sus socios de votar a su favor si eso ocurre. E incluso le reconocen haber conseguido cambiar el marco, dado que ahora el debate pivota en la defensa del presidente y en poner de relieve las malas artes de la derecha.
Sin embargo, hay voces también en Sumar que advierten que el movimiento de Sánchez es extraño, que nadie está en su cabeza ahora mismo y que ni en el seno de su partido esperaban la carta publicada por Sánchez. En consecuencia, advierten que no se debe descartar ninguna posibilidad.
No contemplan la dimisión
El mensaje de Sumar durante esta jornada ha sido reforzar el mensaje de apoyo al presidente, reafirmar su respeto a su decisión personal, que desvelará el lunes, e insistir en que es necesario poner medidas que eviten el 'lawfare', después de que un juzgado haya abierto diligencias previas tras la denuncia de Manos Limpias contra su mujer.
Eso sí, han lanzado mensajes sobre la necesidad de que el Gobierno no solo continúe sino que avance, dado que no puede prevalecer la campaña "ignominiosa" contra el entorno de Sánchez, como ha apuntado la ministra de Sanidad, Mónica García.
Mientras, el portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, ha subrayado que tiene claro que este Gobierno progresista "merece la pena" y abogaba por potenciar su defensa, incluso desde la movilización popular. Junto a ello, dejaba clara su postura en favor de la continuidad de Sánchez, al enfatizar que los presidentes ni dirigentes políticos se pueden quitar con "maniobras mediáticas y judiciales".
A su vez, el dirigente de IU y portavoz adjunto del grupo plurinacional, Enrique Santiago, ahondaba en esta idea, al comprender la situación de Sánchez pero ha remarcado que los cargos públicos tienen "obligaciones" y que si este tipo de movimientos judiciales "fraudulentos" consiguen su objetivo que anhela la derecha, sería algo grave.
Por otro lado, la vicepresidenta y líder del espacio, Yolanda Díaz, cerró filas con el Jefe del Ejecutivo, con quien ha conversado personalmente, pero también reivindicó que ante la ofensiva "ultra" contra él y su mujer había que defender la legitimidad de este gobierno.
De esta forma, en las filas de Sumar piensan que una denuncia que no tendrá recorrido y una actuación judicial en grado muy incipiente sea motivo suficiente para la renuncia de Sánchez, aunque comprenden perfectamente que el presidente esté afectado por el ataque a su mujer.
En este punto, inciden en que su propio partido se ha volcado en apostar por su continuidad y que tanto dejar la Moncloa como convocar elecciones sería una victoria para la derecha y volvería a sentar un peligroso preferente: que el 'lawfare' funciona para descabezar a la izquierda o desprestigiarla, tras casos como los padecidos por Podemos, Ada Colau o Mónica Oltra.
