En plena negociación de los apoyos a Susana Díaz para su investidura como presidenta de la Junta de Andalucía, ha irrumpido el asunto de la mina de Aznalcóllar, que según una investigación judicial, se adjudicó de manera irregular a favor de una empresa vinculada al PSOE.
Susana Díaz ha determinado la paralización de dicha adjudicación, mientras que el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, ha anunciado que suspende las negociaciones para la investidura hasta que Díaz dé explicaciones.
La paralización de la adjudicación ha sido argumentada por Díaz en que cuando un juez tiene serias sospechas sobre el procedimiento de adjudicación de un contrato, este debe esclarecerse.
Ha añadido que si al final del procedimiento resulta alguna irregularidad, no le "temblará el pulso en tomar las medidas necesarias".
El PP ha suspendido de momento las negociaciones de la investidura de Díaz, a menos de 24 horas de que se produzca la tercera votación y le pide explicaciones urgentes.
Izquierda Unida, que fue expulsada del Gobierno andaluz en enero, cree que su salida del Ejecutivo puede tener algo que ver. El secretario de Organización, José Antonio Valero, ha declarado que "en el tiempo que estuvo IU en el Gobierno de Andalucía no hubo ningún caso de corrupción y a los tres días de ser expulsados de ese Gobierno, nos encontramos con esa adjudicación que ya IU estaba denunciando".