PLENO DEL SENADO

Teresa Ribera contrata el Sistema de Alerta Temprana que hasta ahora no tenía la Conferencia del Júcar: "Salva vidas"

La vicepresidenta tercera y ministra subraya que los sistemas de alerta temprana "salvan vidas" y afirma que a España "le urge acelerar su acción climática".

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A.M. | Agencias

Madrid |

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera. | Jesús Hellín / Europa Press

El Ministerio de Transición Ecológica, del que depende Teresa Ribera, ha encargado un contrato de emergencia para instalar un Sistema de Alerta Temprana, denominado SAT y que supondría el refuerzo del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), según El Mundo.

Este aspecto permitiría anticipar el tiempo de respuesta de las cuencas hidrográficas, lo que a su vez podría suponer una reducción del tiempo de aviso a las autoridades correspondientes de Protección Civil. En este sentido, Ribera ha subrayad este miércoles, en alusión a la reciente DANA que golpeó Valencia y otras provincias el pasado 29 de octubre con más de 220 personas muertas, que "los sistemas de alerta temprana salvan vidas".

Ribera hizo esa consideración en su comparecencia en el Pleno del Senado a petición de 54 senadores del PP y después de su intervención por la mañana en el Congreso de los Diputados. Ribera indicó que, como recomienda la literatura científica y Naciones Unidas, "los sistemas de alerta temprana salvan vidas", por lo que estas deben basarse en "las predicciones y avisos de lluvia intensa" en la cuenca mediterránea.

Además, reiteró que "nunca hubo apagón informativo" porque la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya emitió ya a las 7.31 horas del 29 de octubre el aviso rojo por riesgo extremo en el interior norte de Valencia, que amplió a las 9.43 a toda la provincia.

Además, indicó que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) informó "en tiempo real" sobre la pluviometría, el nivel y volumen de los embalses, y el nivel y caudal de los ríos. "Los dos organismos trabajan con evidencia empírica y los dos están integrados esencialmente por personas de alta cualificación técnica", apostilló.

Cabe prepararse "mejor" por las nuevas gotas frías

Por otro lado, Ribera sentenció que "a España le urge acelerar su acción climática" para que sea "más ambiciosa y eficaz" con medidas para reducir las emisiones de gases que calientan el planeta. "Debemos adaptarnos a los impactos del cambio climático y esto implica anticiparnos a los riesgos y mejorar nuestra preparación. Las 'gotas frías' del siglo XX no son equiparables a las del siglo XXI: debemos prepararnos mejor", apostilló.

Por ello, apuntó que "sobra poner en cuestión" el trabajo de organismos como la Aemet y la CHJ. "Les invito a trabajar juntos y a no perder tiempo minando la credibilidad de la ciencia y de las instituciones y a identificar juntos cuáles son las mejores medidas", añadió.

"Trabajemos sobre eso, busquemos consensos en torno a eso, pero no neguemos lo que no tiene ningún sentido negar derivado del nuevo escenario climático. España enfrenta también una nueva realidad hidrológica caracterizada por extremos: disminución de la disponibilidad de agua con periodos duraderos de sequía severa y, al tiempo, episodios más frecuentes e intensos de lluvias torrenciales e inundaciones", indicó.

Ninguna presa derribada

"Un país como el nuestro necesita dedicar cuantos más recursos mejor a la correcta gestión del agua", añadió. Además, apuntó que conviene diseñar "mecanismos de defensa adaptados a extremos" y que los embalses no tienen una capacidad "ilimitada" para frenar avenidas. "Al contrario de lo que se ha difundido falsamente en las últimas semanas, este Gobierno no ha eliminado ninguna presa, sí algunos azudes obsoletos que empeoran la funcionalidad de los ríos y sus cuencas y pueden convertirse en un elemento adicional de riesgo ante fenómenos como el vivido", afirmó.

Igualmente, apostó por fomentar "una cultura de protección frente al riesgo" con un protocolo ágil y facilitar a la población mejor información sobre los riesgos en el territorio y los protocolos de actuación, así como "una correcta gestión de las alertas tempranas".

"Es importante una mayor y mejor capacidad de evaluación de los riesgos y de la respuesta rápida que necesitamos: los protocolos de actuación, la normativa urbanística, los códigos de construcción, todos deben adecuarse al riesgo climático para proteger a la población, pero de poco sirve tener toda la información necesaria si quien debe responder no sabe cómo hacerlo", concluyó.