Gobierno central y Generalitat vuelven al cruce de acusaciones por la gestión el día de la DANA del pasado 29 de octubre, incluso ofreciendo versiones contrarias sobre un mismo hecho. En este caso, la comunicación de alertas meteorológicas de Aemet de la que tienen versiones contradictorias.
Ribera: "La alerta no terminó a las 18:00 horas"
Durante su intervención en el Congreso de los Diputados, Teresa Ribera ha negado categóricamente que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) hubiese comunicado que la alerta por la DANA finalizaría a las 18:00 horas, como sostiene la Generalitat. Según la ministra, las alertas se mantuvieron y se ampliaron sucesivamente hasta las 20:00 y posteriormente hasta las 22:00 horas, siguiendo las actualizaciones del organismo meteorológico.
"No es cierto que la Aemet indicara que la alerta acabaría a las 18:00 horas", ha asegurado Ribera. También ha convertido esa declaración en un dardo, al apuntar que interpretar erróneamente estas alertas puede reducir la capacidad de respuesta tanto de los ayuntamientos como de la población. Además, ha criticado lo que califica como "mentiras" y "negacionismo" en torno a la gestión de los desastres climáticos, apuntando a la necesidad de mayor responsabilidad política en este ámbito.
Susana Camarero: "Aemet señaló que lo peor había pasado al mediodía"
Desde la Generalitat, Susana Camarero sostiene una versión opuesta, asegurando que la Aemet había comunicado el desplazamiento de las lluvias hacia el norte y que lo peor había pasado al mediodía del 29 de octubre. Según la portavoz, el responsable de la Aemet en la Comunidad Valenciana indicó que las precipitaciones se trasladaban hacia Cuenca y que el fenómeno meteorológico terminaría alrededor de las 18:00 horas.
Camarero también ha acusado a Ribera de falta de información crítica durante el crecimiento del barranco del Poyo, que desembocó en inundaciones devastadoras en Chiva y l'Horta Sud. "Durante dos horas y media no recibimos ninguna información, ni llamada, ni desde Aemet ni desde la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ)".
El conflicto por las obras del barranco del Poyo
Otro punto de fricción ha sido la falta de actuaciones en el barranco del Poyo, una infraestructura clave que podría haber mitigado los daños. Ribera asegura que la Generalitat pidió más tiempo, en marzo y junio de 2024, para completar las obras. No obstante, Camarero ha desmentido a la ministra, señalando que los retrasos se originaron antes, cuando Pedro Sánchez asumió la presidencia en 2018.
Camarero sostiene que el análisis de coste-beneficio de las obras fue encargado por el gobierno de Mariano Rajoy, pero que su ejecución quedó pendiente tras la moción de censura de 2018. Según la portavoz del Consell, "desde 2018 se podían haber realizado las obras necesarias. ¿A quién hay que preguntar por qué no se hicieron?".