Tres partidos belgas se oponen al discurso de investidura de Puigdemont en la Cámara flamenca
Tres partidos políticos de Bélgica se opusieron a que el expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont pronuncie un eventual discurso de investidura en el Parlamento flamenco, por entender que se "instrumentalizaría" una cámara legislativa belga en relación a un país extranjero.
Las críticas ante esa eventualidad proceden de los partidos belgas CDV, Open VLD y Groen, con representación en el Parlamento flamenco, de un total de diez formaciones políticas.
El líder del grupo de los cristianodemócratas CDV, Koen Van den Heuvel, segunda fuerza parlamentaria en Flandes con 27 escaños, se declaró contrario a que se permita "instrumentalizar" el Parlamento, según declaraciones que recoge la agencia Belga.
En el mismo sentido se pronunció el máximo responsable del partido de los liberales demócratas flamencos Open VLD, Bart Somers, cuya formación es la tercera en escaños, con 19 diputados.
"Los partidos políticos tienen libertad para invitar a quienquieran al Parlamento. Pero aquí se utilizaría el Parlamento, como institución y como símbolo de nuestra democracia, y se mezclaría en un juego político extranjero. Me parece verdaderamente inadecuado", afirmó Somers.
El partido ecologista Groen también expresó su disconformidad ante una eventual intervención del expresidente de la Generalitat de Cataluña en la cámara flamenca.
Por su parte, el presidente del partido nacionalista flamenco NV-A, Bart De Wever, dijo hoy que Puigdemont tendría que conseguir el acuerdo del Parlamento flamenco, si quiere pronunciar en ese hemiciclo regional belga su discurso de investidura.
En declaraciones a la televisión VTM, De Wever, también alcalde de Amberes (norte), afirmó que "si Carles Puigdemont quiere hacer su discurso de investidura en el Parlamento flamenco es la cámara la que tiene que decidir, no le corresponde a mi partido, el NV-A", aunque esa formación es la primera de Flandes, con 42 de los 124 escaños de ese hemiciclo regional.
"Sé qué busca un sitio para pronunciar su discurso de investidura y que había pensado en el Parlamento (flamenco), que sería un lugar hermoso" para ese acto, afirmó De Wever, aunque dijo que hasta el momento Puigdemont no le había formulado una petición concreta.
De Wever, cuyo partido es mayoritario en la coalición del Gobierno federal del país, agregó que Puigdemont es un "amigo" al que su formación intenta "ayudar en el plano logístico" en Bélgica, donde llegó hace tres meses tras ser cesado en aplicación del artículo 155 de la Constitución española, que suspendió la autonomía catalana tras la declaración unilateral de independencia.
Por su parte, el presidente de la mesa del Parlamento flamenco, Jan Peumans, del NV-A, afirmó hoy a la televisión VRT que Puigdemont no había presentando hasta el momento una petición formal en tal sentido.
En noviembre pasado, el Parlamento regional de Flandes rechazó una moción presentada por el partido ultraderechista flamenco Vlaams Belang para reconocer la independencia de la autonomía española de Cataluña, que fue respaldada solo por este grupo, minoritario en la cámara regional belga.
El Tribunal Constitucional español acordó este sábado por unanimidad suspender la investidura de Puigdemont como presidente de la Generalitat en el caso de que el Parlament catalán acuerde que sea telemática o cualquier otra fórmula no presencial.
Puigdemont, reclamado por la Justicia española por presuntos delitos de sedición, rebelión y malversación, tampoco podría ser presidente de personarse en la cámara catalana sin la pertinente autorización judicial, aunque comparezca personalmente en la Cámara, si está vigente una orden judicial de busca y captura e ingreso en prisión.
Según la cadena "VRT", Puigdemont participó hoy en la recepción de Año Nuevo del NV-A en la localidad de Lennik, al oeste de Bruselas, donde pronunció un breve discurso en el que calificó de "anormalidad" democrática la resolución del Constitucional y reiteró que regresará a España si obtiene "garantías".
Puigdemont, prófugo de la Justicia española, huyó a Bélgica el pasado 30 de octubre en compañía de cuatro exconsejeros, después de que el Gobierno español los cesara en cumplimiento del artículo 155 de la Constitución española.