En una entrevista que publica El Periódico, Turull, que se encuentra en la prisión de Lledoners (Barcelona), reconoce que "el día a día es difícil" en la relación entre las principales formaciones independentistas catalanas, JxCat y ERC.
Según Turull, "muchos liderazgos no pueden participar en las decisiones, que hay que tomar en poco tiempo" porque los líderes de ambas formaciones "están en la cárcel o en el exilio", y porque, además, "vivimos un acoso policial y judicial en Cataluña" aunque "los políticos debemos trabajar para conseguir la unidad"
Sobre cómo encara el inminente juicio contra los líderes del 'procés', Turull destaca que "ante el Tribunal Supremo no pediré perdón y reivindicaré lo que hicimos el 1 de octubre y el 27 de octubre".
Turull afirma que no confía en tener un juicio justo, en primer lugar porque "no hay igualdad entre las partes. Nosotros venimos de una larga prisión provisional, llegaremos esposados, nos trasladarán al calabozo cada día durante meses y no tendremos tiempo suficiente para preparar las defensas, mientras que en cambio, la acusación llegará recién salida de la ducha y habiendo desayunado un cruasán con zumo de naranja".
Sobre la situación política en el ámbito español, Jordi Turull afirma que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "debe decidir si piensa en las próximas elecciones o en las próximas generaciones", y considera que ofrecer una solución política a Cataluña no implica perder las elecciones generales si la plantea "con convencimiento".
Opina, sin embargo, que a Pedro Sánchez "le falta fortaleza en las convicciones. Da volantazos. Por un lado, habla de diálogo y después nos tacha de 'pandilla' ¡a dos millones de personas!".
Con respecto al pacto del PP y Ciudadanos con la extrema derecha para entrar en las instituciones en Andalucía, Turull indica que "finalmente se han quitado de encima sus complejos para normalizar el franquismo estructural".