Este Ministerio agrupará Ciencia, Innovación y Universidades, separadas éstas últimas de la cartera de Educación, en manos de Isabel Celaá, persona muy cercana a Pedro Sánchez y que tendrá que abordar el Pacto por la Educación con una propuesta que satisfaga a todos los grupos. Algo que reclama, desde el consenso, la Federación de padres de alumnos, Concapa.
Igualdad pasa a ser un Ministerio independiente, con la vicepresidenta Carmen Calvo al frente, y con la puesta en marcha de las medidas contempladas en el Pacto contra la Violencia de Género. El objetivo es seguir trabajando en las políticas de conciliación. En cuanto a la Sanidad, los retos de la ministra Carmen Montón pasan por universalizar la sanidad pública y un nuevo modelo de financiación con la eliminación de los copagos en su agenda.
La apuesta por la infancia queda patente con la creación del Alto Comisionado contra la pobreza infantil, que dependerá directamente del presidente Sánchez. Diversas ONG´s han mostrado su conformidad con ello, como el director ejecutivo de UNICEF, Javier Martos, que asegura en nuestros micrófonos que el paso dado por Sánchez demuestra inquietud frente a un problema social muy importante
La preocupación por el Medio Ambiente es otro de los asuntos a los que Sánchez ha querido dar relevancia: Teresa Ribera ocupará la cartera de Energía, Medio Ambiente y Cambio Climático con la tarea de encarrilar la transición energética y el borrador de Ley de Cambio Climático que podría replantearse. Greenpeace celebra su creación pide a la ministra que lidere esa transición.
Cultura pasa también a ser un ente independiente con Ministerio propio. El sector cinematográfico pide el reconocimiento de la industria de una manera digna y aplaude la decisión. El presidente del Gobierno recupera así el Ministerio eliminado en 2011 y forma un equipo de Gobierno con un amplio espacio para lo social.