Anoche alrededor de 300 personas se juntaron para tomar las uvas en la calle Ferraz de Madrid frente a la sede del Partido Socialista en protesta por la amnistía a los líderes independentistas.
Durante la protesta, convocada por la organización Revuelta vinculada a Vox, decenas de manifestantes gritaron proclamas contra el presidente del Gobierno y ahorcaron a un muñeco que representaba a Pedro Sánchez.
El monigote fue colgado de un semáforo y golpeado por los congregados mientras cantaban "Pedro Sánchez, hijo de puta" o "así tiene que acabar el Pedro Sánchez de verdad".
Los ministros culpan a la derecha de incitar al odio
Tras estos hechos, los ministros Pilar Alegría, Óscar Puente y Diana Morant han denunciado públicamente la simulación del ahorcamiento del presidente del Gobierno.
"Empezaron asediando las sedes del PSOE y ahora simulan el ahorcamiento del presidente del Gobierno. ¡Basta ya!", ha criticado la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en una publicación en la red social X en la que ha condenado los mencionados actos.
Por su parte, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha condenado estos hechos y asegura que no se pueden consentir.
"La verdad es que han dejado de hacer gracia hace bastante tiempo. Las actitudes complacientes de algunos líderes del PP y de sus terminales mediáticas les han dado alas. Esto no se puede consentir ya".
Asimismo, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha denunciado que "la derecha y sus líderes convierten los insultos en lemas que invitan al odio". "De esos barros vienen estos lodos", ha agregado al respecto.
