A falta de dos días para que se debata la convalidación de la reforma laboral en el Congreso, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha agradecido los apoyos de Teruel Existe, PRC, Coalición Canaria y Nueva Canaria, que se suman a los cerrados esta mañana con Más País y Compromís, sin embargo, ha ignorado el apoyo de Ciudadanos, determinante para que salga ante el rechazo de ERC y EH Bildu.
En este sentido, ha advertido que lo que se vota el jueves es si se mantiene vigente una ley que desde el 30 de diciembre "lleva mejorando la vida de los trabajadores".
Los que rechacen la convalidación del decreto, ha insistido Díaz, estarán "diciendo sí al marco de relaciones laborales diseñado por el PP" y tendrán que explicar a los trabajadores que su "no" puede provocar que el viernes estos trabajadores se levante con menos derechos que el día anterior. Ha asegurado que la ley está teniendo ya efectos muy positivos, que mañana reflejarán los datos de la contratación indefinida. "Se van a llevar una sorpresa", ha dicho.
"Los que rechacen la convalidación del decreto estarán diciendo sí al marco de relaciones laborales diseñado por el PP"
Díaz sigue negociando a contrarreloj para intentar el apoyo de ERC, EH Bildu, PNV y otros socios de la investidura, aunque la reforma laboral ya saldría adelante con los votos que tiene, y por eso ha recordado que los que voten en contra "están diciendo no a la ultraactividad indefinida y al incremento de los salarios en los sectores frágiles", entre otras cosas.
ERC, Bildu, la CUP y BNG piden una "reforma laboral más ambiciosa"
A día de hoy, la convalidación de la reforma laboral pactada con patronal y sindicatos podría salvarse con el apoyo de Ciudadanos (9) y de otros partidos minoritarios, como PDeCAT (4), Más País (2), Teruel Existe (1), PRC (1), Nueva Canarias (1), Coalición Canaria (1), Compromís (1) y UPN (2), que conformarían una mayoría de 176 diputados.
ERC, Bildu, CUP y BNG han apelado a la "voluntad política del Gobierno" para "abrir un proceso de diálogo y negociación" con el fin de alcanzar un acuerdo que permita aprobar una reforma laboral "ambiciosa", al considerar que la que se debate estos días "no constituye la derogación" de la de 2012 y la nueva legislación laboral debería abarcar "aspectos troncales que han quedado excluidos" de la misma.
Así lo han trasladado Jordi Salvador, Mertxe Aizpurua, Mireia Vehí y Nestor Rego al comparecer en el Congreso para dar a conocer una declaración conjunta acordada sobre la reforma laboral con unas propuestas que, según dijeron, "cuentan con el respaldo de las mayorías sociales".