La actividad volcánica del Cumbre Vieja en La Palma se está replicando por todo el mundo. El pasado 13 de agosto, en las islas Ogasawara en Japón, tuvo lugar una erupción a gran escala del volcán submarino Fukutoku Okanoba que aún sigue rugiendo después de un año inactivo.
Los seísmos hicieron emerger un islote de ceniza y roca. Este resurgió cerca de la isla de Iwo Jima, donde se produjo una de las batallas más sangrientas de la Segunda Guerra Mundial entre los Estados Unidos y Japón de febrero a marzo de 1945.
Pero no solo el islote salió a flote. Con él también salieron a la superficie varios buques de esa época. La televisión japonesa All Nipon News ha captado las imágenes de los barcos que se habían hundido en la Segunda Guerra Mundial.
La salida a la superficie de estos navíos se debe a la elevación de la isla Iwo Jima como consecuencia de los temblores provocados por la erupción y de los sedimentos de ceniza y roca que han aparecido. Es un proceso frecuente según los datos recabados sobre la actividad volcánica de los más de 110 volcanes que continúan activos en Japón, aunque este se trata de uno de los más cambiantes. En cambio, los geólogos y vulcanólogos de Centro de Promoción de la Investigación de Volcanes apuntan que el islote desaparecerá de nuevo, incluso los esqueletos de los barcos emergidos.