El acuerdo entre Grecia y sus acreedores permite iniciar la negociación sobre la deuda
Greciay las instituciones internacionales que participan en su rescate financiero negociarán durante las próximas semanas una estrategia para garantizar la sostenibilidad de la deuda helena, después de que llegasen a un acuerdo preliminar sobre las reformas que debe aplicar el país.
"Este acuerdo preliminar deberá ahora ser complementado con más discusiones en las próximas semanas sobre una estrategia creíble para asegurar que la deuda de Greciaes sostenible", dijeron hoy en un comunicado las instituciones que participan en el rescate.
Los acreedores -Comisión Europea, Banco Central Europeo, Mecanismo de Estabilidad yFondo Monetario Internacional- y el Gobierno griego alcanzaron esta madrugada en Atenas tras una maratoniana noche de negociaciones un "acuerdo técnico preliminar" encaminado al cierre de la segunda evaluación del programa de rescate.
Las instituciones incidieron en que "las autoridades griegas han confirmado su intención de implementar rápidamente" el paquete de medidas políticas, que aún debe ser aprobado por el Parlamento griego para poder entrar en vigor.
El comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, consideró que "los nuevos esfuerzos acordados por las autoridades griegas despejan el camino para una rápida conclusión de la segunda revisión" del rescate heleno y subrayó que el acuerdo "es un paso muy positivo después de meses de complejas negociaciones".
"La rápida implementación de estos compromisos debería permitir al Eurogrupo (los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona) respaldar el acuerdo en su próxima reunión", dijo Moscovici en referencia al encuentro previsto para el próximo 22 de mayo.
"Ahora depende de todas las partes encontrar un entendimiento sobre la cuestión de la deuda griega en las próximas semanas", incidió el político francés.
El cierre de la revisión es necesario para dar luz verde a un nuevo desembolso del programa de 86.000 millones de euros concedido a Grecia de cara a que el país pueda afrontar los vencimientos por casi 7.000 millones de euros a los que debe hacer frente en julio.
El acuerdo sobre las reformas era indispensable para que Grecia y los acreedores pudiesen pasar a discutir sobre los objetivos fiscales para el país a partir de 2018, cuando finaliza su rescate, así como la sostenibilidad y un eventual alivio de la deuda griega.
Este último punto es clave para que el Fondo Monetario Internacional decida si participa financieramente en el rescate, pero también para el Ejecutivo griego, que ha asegurado que no implementará las medidas acordadas si no se encuentra una solución para la deuda.
El paquete de reformas incluye recortes en las pensiones, así como medidas fiscales que deberán aplicarse en 2019 y 2020, respectivamente, para conseguir un ahorro equivalente al 2% del PIB heleno, al tiempo que prevé también medidas expansivas que Atenas podrá aplicar si cumple sus objetivos.