El ataque se produjo dentro de una oleada de episodios en Alemania en el que personas vestidas de payasos diabólicos asustan a viandantes y les amenazan, a veces incluso con motosierras, hachas o navajas.
Según el relato de los hechos ofrecido por las fuerzas de seguridad, los dos menores eran conocidos del barrio y el agresor procuró los primeros auxilios al malogrado payaso diabólico tras el incidente hasta que llegó al lugar la ambulancia.
El menor de 14 años fue retenido temporalmente por la policía, aunque posteriormente fue entregado a sus padres mientras se estudia el caso.
El portavoz de la Policía berlinesa, Thomas Neuendorf, lamentó hoy en unas declaraciones a la radio pública regional "Radio Eins" los hechos: "Ayer pasó lo que nos estábamos temiendo, que todo esto escalase".
Neundorf subrayó que los payasos que asustan a otras personas pueden ser condenados a hasta un año de cárcel y recordó que los agredidos tienen derecho a defenderse de un ataque "pero deben también mantener la proporción".
El portavoz abogó asimismo por no utilizar el próximo lunes, coincidiendo con la celebración de la fiesta de Halloween, los disfraces de payasos, para evitar malentendidos.
Desde hace unos días se están multiplicando en Alemania los incidentes con payasos diabólicos, una práctica que comenzó en Estados Unidos y que en las últimas semanas se está extendiendo por el norte de Europa, de Austria a Suecia, pasando por Noruega y Dinamarca.
