HAN COMENZADO CON LA DESCONTAMINACIÓN

Advierten de que varias zonas de Salisbury podrían estar contaminadas por el agente nervioso que envenenó al ex espía ruso

Varias zonas de la localidad inglesa de Salisbury podrían estar contaminadas por el agente nervioso del tipo Novichok con el que el pasado 4 de marzo fueron envenenados el exespía Serguéi Skripal y su hija Yulia, según informaron expertos del Gobierno británico.

ondacero.es

Madrid |

Labores de descontaminación de Salisbury | EFE

"En puntos muy, muy específicos tenemos que suponer que existen concentraciones relativamente altas -del agente nervioso- que podrían ser tóxicas para las personas", apuntó el principal asesor científico del Ministerio británico de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra, por sus siglas el inglés), Ian Boyd.

Los trabajos de descontaminación, que se espera se alarguen durante meses, comenzaron en nueve puntos de la localidad, entre ellos la comisaria de policía y el Ayuntamiento, que permanecerán cerrados durante ocho semanas. Aún así, el subjefe de policía del condado de Wiltshire, donde está ubicada Salisbury, aseguró que los funcionarios de ambos organismos se trasladarán a otros lugares de la ciudad para seguir operando con normalidad.

Además, dos ambulancias, un aparcamiento y la vivienda del detective Nick Bailey, que tuvo que ser hospitalizado al entrar en contacto con la sustancia tóxica, también serán descontaminados. La casa del exagente ruso, donde se encontró la concentración más alta de Novichok, será el último lugar en el que se realizarán las labores de limpieza, informó el ministerio, que ofreció una reunión informativa junto con representantes del Ayuntamiento, sanitarios y de la Policía para dar los datos actualizados sobre el caso Skripal a los vecinos de Salisbury.

Según los expertos, el agente nervioso, que esta semana se descubrió que tenía forma líquida, no se evapora ni desaparece con el tiempo, por lo que requiere una "limpieza intensa" con productos químicos para ser eliminado. Casi 200 militares ayudarán con el trabajo de descontaminación, que los responsables estiman requerirá un desembolso de millones de libras.

La semana pasada, el hospital Salisbury District dio el alta a Yulia Skripal, de 33 años, mientras que su padre, de 66, aún permanece hospitalizado, aunque, según los médicos, su estado ha mejorado. El suceso, del que el Gobierno de la primera ministra británica, Theresa May, acusa directamente al Ejecutivo ruso, con el presidente Vladimir Putin a la cabeza, ha desatado una grave confrontación entre ambos países, que ha incluido la expulsión de cientos de diplomáticos.