Al menos siete personas han desaparecido tras las inundaciones causadas por la destrucción de la presa de Nueva Kajovka, en el río Dniéper y a 60 kilómetros de la ciudad ucraniana de Jersón.
Además, el desbordamiento de la presa ha provocado la inundación de 10.000 hectáreas de tierras agrícolas en la margen occidental del río Dniéper y afecta ya a 29 localidades que se encuentran totalmente anegadas.
Unas 1.700 personas han sido evacuadas de estos territorios y 17 han sido rescatadas de tejados, pues el agua ha llegado a alcanzar 12 metros de altura. Las autoridades han pronosticado que el nivel del agua comience a bajar dentro de tres días.
La destrucción de la presa deja inservibles 31 sistemas de riego
Según el Ministerio de Agricultura de Kiev, la destrucción de la presa deja inservibles 31 sistemas de riego de las provincias de Dnipropetrovsk, Jersón y Zaporiyia, todas ellas situadas en el este y el sureste de Ucrania.
Estos sistemas permitían regar más de medio millón de hectáreas.
Las autoridades ucranianas han advertido de las consecuencias negativas que la catástrofe tendrá para la producción agrícola en la zona, ya muy afectada antes de la destrucción de la presa por la guerra y las minas explosivas sembradas en muchos campos desde que Rusia comenzó el año pasado su invasión militar de Ucrania.
Las autoridades prorrusas de Jersón extienden el estado de emergencia
Las autoridades prorrusas de Jersón, parcialmente ocupada por las tropas rusas, han anunciado este miércoles la extensión del estado de emergencia a toda la región por las inundaciones registradas a raíz del ataque a la presa de Kajovka.
Han alertado de que la localidad de Korsunka se encuentra "totalmente sumergida debido a la descarga descontrolada de agua desde la reserva" tras el ataque, según informaciones de la agencia de noticias rusa TASS.
42.000 personas se encuentran en la "zona de desastre"
El Gobierno ucraniano, por su parte, ha alertado de que unas 42.000 personas se encuentran en la "zona de desastre", donde podrían registrarse graves inundaciones durante los próximos días, por lo que ha alertado de que la "verdadera magnitud de lo sucedido se desconoce por el momento".
Moscú niega cualquier implicación en el ataque
Moscú sigue negando cualquier implicación en el ataque, mientras que Kiev insiste en que la autoría es rusa. "Fue una explosión deliberada. Sabían exactamente lo que estaban haciendo", dijo el martes el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.
Además, Zelensky ha acusado a Moscú de abandonar a las miles de personas que viven en la zona ocupada por Rusia y que está completamente anegada.
Zelensky: "Los terroristas rusos han demostrado una vez más que son una amenaza para todo lo que vive"
El presidente ucraniano ha publicado en Twitter unas imágenes de las graves inundaciones que ha provocado el ataque a la presa de Kajovka.
"Los terroristas rusos han demostrado una vez más que son una amenaza para todo lo que vive. La destrucción de una de las reservas de agua más grandes de Ucrania es absolutamente deliberada. Al menos 100 mil personas vivían en estas áreas antes de la invasión rusa. Al menos decenas de miles todavía están allí. Cientos de miles de personas se han quedado sin acceso normal al agua potable. Nuestros servicios, todos aquellos que puedan ayudar a la gente, ya están implicados. Pero solo podemos ayudar en el territorio controlado por Ucrania. En la parte ocupada por Rusia, los ocupantes ni siquiera intentan ayudar a la gente. Esto demuestra una vez más el cinismo con el que Rusia trata a las personas cuyas tierras ha capturado y lo que Rusia realmente aporta a Europa y al mundo".