En Pittsburgh

Encuentra un almacén de más de 200 nueces que unas ardillas habían creado dentro del motor de su coche

En Pittsburgh donde una conductora se ha topado con un insólito almacén bajo el capó de su coche. Más de 200 nueces que una o varias ardillas hacendosas habían ido depositando en los huecos del motor, convirtiéndolo en su almacén de invierno.

Belén Gómez del Pino

Madrid |

La conductora, llamada Holly, no se percató de nada hasta que un intenso olor a quemado empezó a salir de su coche mientras conducía. No veía humo pero se detuvo para comprobar qué ocurría. Al levantar el capó descubrió un botín de nueces y ramas bajo la batería, junto al radiador, en el ventilador. Las nueces se estaban tostando y la madera desprendía el fuerte olor a quemado.

Holly y su marido, Chris, tardaron más de una hora en vaciar el peculiar almacén y llevaron después el coche al taller donde siguieron eliminando nueces. En total llenaron medio contenedor de basura.

El matrimonio había dejado el coche aparcado en la calle y sin usarlo durante un mes, tiempo en que las ardillas encontraron en él una despensa perfecta.