Un análisis de sangre puede detectar el cáncer años antes de que se desarrolle
Un nuevo tipo de análisis de sangre puede detectar, con distinto grado de acierto, hasta diez tipos de cáncer antes de que se desarrollen, lo que podría llevar a efectivos programas de prevención, publica 'The Daily Telegraph'.
El diario británico se hace eco de un estudio realizado por el Centro Cleveland de Ohio (EEUU), que será presentado en el congreso anual de la Sociedad americana de Oncología Clínica, que se celebra del 1 al 5 de junio en la ciudad estadounidense de Chicago.
Según el 'Telegraph', los científicos comprobaron que el simple procedimiento, que detecta "trazos genéticos de cánceres", tiene hasta un 90 % de fiabilidad en algunos casos. La prueba consiste en buscar "fragmentos de ADN liberados al flujo sanguíneo por células cancerígenas de crecimiento rápido", explica el periódico.
El autor del estudio, Eric Klein, dice que el análisis de sangre "es potencialmente el Santo Grial de la investigación" sobre esta enfermedad, al "poder detectar cánceres que ahora son difíciles de curar en una fase temprana, cuando son más fáciles de curar".
"La mayoría de cánceres se detectan en fases tardías, pero esta 'biopsia líquida' nos da la oportunidad de descubrirlos meses o años antes de que alguien desarrollara los síntomas y fuera diagnosticado", afirma. Los expertos hicieron su investigación con 1.600 adultos, de los cuales 749 no tenían cáncer y 878 acababan de ser diagnosticados. Los análisis fueron capaces de detectar indicios en la sangre de diez tipos de cáncer con una fiabilidad media de más del 50 %, explica el periódico.
Los mejores resultados se obtuvieron en los casos del cáncer de ovario y de páncreas, donde la fiabilidad de diagnóstico fue del 90 y el 80 %, respectivamente, para personas con estas enfermedades. Cuatro de cinco personas fueron diagnosticadas además correctamente con cánceres de hígado y vesícula biliar, y la detección de los linfomas y mielomas fue acertada en un 77 y 73 %, añade el "Telegraph".
Dos tercios de los voluntarios fueron certeramente diagnosticados con cáncer de intestino y un 58 % de mama triple negativo, mientras que fue fiable en más de un 50 % la detección de los de pulmón, cerebrales y de esófago. El éxito fue menor en el caso de los cánceres de estómago, útero y próstata, afirma el rotativo.