El juicio a Abdeslam tendrá lugar el 5, 6, 8 y 9 de febrero próximos ante el Tribunal Correccional de Bruselas, informó este lunes esa corte. Junto con Abdeslam está acusado por el tiroteo Sofien Ayari, también sospechoso de haber participado en los atentados de París.
El aplazamiento se anunció ya la semana pasada, cuando el letrado de Abdeslam, Sven Mary, solicitó más tiempo para preparar la defensa de su cliente y el tribunal aceptó la petición, pero hasta este lunes se desconocía la nueva fecha. Hasta hace unos días, Abdeslam, de 28 años, no había designado a un letrado, después de que varios abogados asumieran y abandonaran su defensa, entre ellos, el propio Mary.
Abdeslam, de nacionalidad francesa y origen marroquí, pero criado en Bélgica, se encuentra encarcelado bajo estrictas medidas de seguridad y aislamiento en la prisión francesa de Fleury-Mérogis, al sur de París. Los dos sospechosos están inculpados por intento de asesinato de policías y de tenencia de armas prohibidas en contexto terrorista, por un tiroteo en Bruselas que dejó tres agentes heridos el 15 de marzo de 2016, cuatro días antes de su captura.
Los acusados, junto a un tercer sospechoso terrorista de nacionalidad argelina que resultó muerto en la refriega, Mohamed Belkaid, se escondían en un apartamento del distrito bruselense de Forest cuando varios policías belgas y franceses intentaron detenerlos y se produjo el tiroteo que les permitió escapar. Salah Abdeslam es hermano de Ibrahim, uno de los terroristas suicidas de París el 13 de noviembre de 2015.
Aquella noche Salah Abdeslam huyó de la capital francesa sin activar su chaleco explosivo y llegó a Bruselas, donde logró escabullirse de las fuerzas de seguridad durante cuatro meses, hasta que fue detenido el 18 de marzo de 2016, tres días después del tiroteo con la policía por el que está procesado.
Cuatro días después de su captura en el distrito bruselense de Molenbeek-Saint-Jean el 18 de marzo de 2016, otros tres integrantes de Daesh atentaron contra el aeropuerto y la red de metro de la capital belga, lo que dejó 32 personas muertas y causó lesiones a otras 340. Desde que Bélgica entregó a Abdeslman a Francia en abril de 2016, el presunto terrorista se ha negado a responder a los jueces que instruyen la investigación sobre los atentados de París.