"Nuestra activista estaba distribuyendo condones para las chicas y ofreciéndoles consejos sanitarios, pero la policía intervino y detuvo a todas: a nuestra colega y a tres profesionales del sexo", explicó a Efe.
El portal informativo marroquí Yabiladi.com, que fue el primero en revelar aquel hechos, señaló que, aunque la activista enseñó a los servicios de seguridad documentos que demuestran que su acción la ejercía en nombre de la ALCS, una asociación legal, los agentes se negaron a reconocer el documento que acreditaba su misión.
"A la activista la retuvieron en un centro policial durante dos o tres horas y luego la soltaron, mientras que las otras tres chicas tuvieron que pasar la noche en la comisaría central de Marrakech y fueron puestas en libertad al día siguiente", relató Badil a Efe.
Badil explicó que este tipo de incidentes ya han ocurrido en ocasiones anteriores y denunció que la policía utiliza la posesión de condones como prueba para acusar a las chicas de prostitución, cuyo ejercicio está penado con hasta un año de prisión.
Las profesionales del sexo -dijo Badil- han optado por no llevar con ellas los preservativos, precisamente para no incurrir en un "delito de prostitución".
La ALCS, creada en 2003, tiene un acuerdo de cooperación con el Ministerio de Sanidad marroquí para lanzar acciones preventivas contra el sida y distribuye únicamente en Marrakech cada año un total de 200.000 condones cedidos por ese departamento gubernamental.