Martínez fue encontrado muerto un día después de su desaparición en una barriada del sector de Choloma, en el norte hondureño, pero su cuerpo no fue reconocido por sus familiares hasta ayer, según el Ministerio Público hondureño.
Hasta ahora se desconocen las causas de la muerte de Martínez, quien al parecer salió el día 1 con una persona, no identificada, en un vehículo y no regresó a su casa, por lo que sus familiares lo declararon desaparecido, de acuerdo con la prensa local.
Como su cadáver no presenta heridas, el Ministerio Público trabaja en la hipótesis de que fuera estrangulado.
Tres equipos de la Fiscalía de Delitos contra la Vida, la Agencia Técnica de Investigación Criminal y la Dirección Policial de Investigaciones están a cargo de las pesquisas, precisó el Ministerio Público, que condenó el asesinato de Martínez, quien era simpatizante del oficialista Partido Nacional.
Agregó que la Fiscalía General de Honduras "garantiza que hará todos los esfuerzos para dar con los responsables de este repudiable hecho".
Martínez coordinaba un Centro de Alcance en Chamelecón, que apoya el Gobierno estadounidense en Honduras para prevenir la violencia y facilita oportunidades a los jóvenes.
El embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, James Nealon, condenó hoy el asesinato de Martínez y reclamó a Honduras una "completa y exhaustiva investigación" para esclarecer las circunstancias del crimen.
"Condenamos en los términos más enérgicos el presunto asesinato de René Martínez", cuyo fallecimiento "nos ha conmocionado", declaró el diplomático estadounidense en un comunicado.
Destacó que se ha comunicado con las autoridades hondureñas que trabajan en la investigación y ofrecido la "asistencia" de su país para que "se haga justicia".
El asesinato de Martínez también fue condenado por la Unión Europea y su representante especial para los Derechos Humanos, Stavros Lambrinidis, que se encuentra en Honduras desde el jueves.
"Estoy muy consternado por el asesinato del defensor de derechos humanos René Martínez. La única vía para poner fin a la violencia es luchar efectivamente contra la impunidad", subrayó Lambrinidis en un comunicado divulgado por la delegación de la UE en Tegucigalpa.
Además, exigió "investigaciones expeditas y profundas" para aclarar lo que ha ocurrido y para que la justicia prevalezca, y ofreció su "más sentido pésame" a la familia de Martínez y al pueblo hondureño.
El enviado de la UE enfatizó la importancia de implementar en Honduras de manera "urgente y efectiva" un mecanismo de protección de los defensores de los derechos humanos, periodistas, comunicadores sociales y operadores de justicia.
La Unión Europea señaló que los asesinatos de defensores de los derechos humanos deben "cesar inmediatamente" y exigió a las autoridades hacer todo lo posible para garantizar su seguridad.
Aseguró además que la UE está "dispuesta a apoyar todo esfuerzo contra la impunidad y en favor de la paz" en el país centroamericano, que registra a diario una media de trece asesinatos por diversos motivos.
Más de 170 miembros de la comunidad LGBTI han sido asesinados en Honduras entre 2011 y lo que va de este año, según cifras del estatal Comisionado de los Derechos Humanos.