EN CHINA

Un asesino es incapaz de hablar tras pasar 12 años fingiendo ser mudo

El hombre huyó de su domicilio tras asesinar al tío de su esposa. Entonces comenzó una nueva vida muy lejos de su localidad fingiendo ser mudo. Sin embargo, años más tarde la Policía dio con él y descubrió que sus cuerdas vocales habían quedado inutilizadas tras 12 años sin emitir un sonido.

ondacero.es

Madrid | 28.12.2017 17:29

Agentes de la policía china
Agentes de la policía china | EFE/Archivo

Un ciudadano chino, que fue condenado por asesinato, ha sido detenido tras evadir a la policía durante 12 años fingiendo ser mudo. El hombre, identificado como Zeng, ha sido acusado de asesinar al tío de su esposa en el año 2005 tras una disputa por el pago de un alquiler.

Zeng supuestamente apuñaló al hombre hasta la muerte y decidió huir de su hogar en Hangzhou. Una vez llegó a su nuevo destino cambió de identidad, haciéndose llamar Wang Gui, y haciéndose pasar por una persona muda.

Según los medios locales, tal y como recoge 'The Telegraph', el hombre se trasladó más tarde a una aldea en la provincia de Anhui, a 700 kilómetros de donde residía. Allí consiguió un trabajo en la construcción y conoció a su segunda esposa, con quien tuvo un hijo. Durante todo ese tiempo se mantenía en silencio para mantener a salvo su verdadera identidad.

Sin embargo, cuando las autoridades estaban llevando a cabo unas encuestas en los hogares de la aldea, descubrieron que el hombre carecía de documentos de identidad, por lo que le tomaron una muestra de sangre y ADN para averiguar su verdadera identidad.

En ese momento descubrieron que se trataba del hombre que estaba siendo buscado desde hacía años por un supuesto crimen.

Según cuenta la Policía, el hombre no podía hablar con los agentes porque al pasar tantos años sin hablar fingiendo ser mudo, sus cuerdas vocales se habían desgastado, volviéndose inutilizables.

En vez de emitir sonidos, optó por comunicarse con los interrogadores escribiendo notas. Al preguntarle que por qué fingió ser mudo, el hombre señaló que cuanto menos dijera, menos posibilidades de cometer un error tenía.