El portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henry Brandet, ha explicado que aunque "no se puede descartar" la hipótesis terrorista, "no es la pista privilegiada" a la vista de las informaciones sobre el conductor, que empotró su coche en la terraza de una pizzería en la localidad de Sept-Sorts, y que fue inmediatamente detenido.
Se trata de un hombre de nacionalidad francesa nacido en 1985 y sin antecedentes que la semana pasada había intentado suicidarse y que, según sus primeras declaraciones, con su acto también había querido quitarse la vida, señaló en declaraciones al canal "BFMTV" Brandet, que habló de un perfil psicológico "inestable".
En la misma línea que el portavoz ministerial, la Fiscalía de Meaux ha destacado que "a priori" no parece que sea una acción terrorista. De hecho, la Fiscalía de París, que es la que tiene competencia en materia terrorista en todo el territorio francés, no se ha hecho cargo de las investigaciones.
Los hechos ocurrieron poco después de las 20:00 locales (18.00 GMT) en Sept-Sorts, una pequeña localidad de unos 450 habitantes a una cuarentena de kilómetros en el este de París.
Según ha contado el subprefecto (subdelegado del Gobierno) del distrito de Torcy en una entrevista a la emisora "France Info", la niña fallecida tenía 12 años. Hubo también ocho heridos graves y uno leve a causa del atropello, cometido con un BMW de color gris.
El subprefecto ha precisado que en las labores de rescate de los heridos, que han sido trasladados a hospitales de la zona, participó un helicóptero.