La encuesta, realizada entre julio y septiembre de este año, revela que el 23 % de los 1.000 entrevistados manifestó que la economía mejora, mientras que el número de aquellos hispanos que creen que las cosas están empeorando ha incrementado progresivamente del 16 % en el primer semestre, al 29 % en el tercero.
Esto se ve influenciado además por el hecho de que el índice de aprobación del presidente Trump descendió hasta el 31 %, 8 puntos porcentuales menos que en el primer trimestre, cuando el magnate inició su mandato.
En esta encuesta, el 16 % de los entrevistados se identificó como republicano, el 52 % como demócrata y el 13 % como independiente.
Sin embargo, en cuanto a la economía familiar, el 65 % de los encuestados indicó que están mejor financieramente que hace un año y el 74 % espera mejorar.
FAU indica que el Hispanic Consumer Sentiment Index (CSI), que explora las percepciones de los hispanos a nivel nacional, se sitúa en 92 puntos, casi 3 puntos menos que en el segundo trimestre de 2017.
Además, el sondeo, con un margen de error del 3,5 %, apunta que el 61 % de los encuestados aseguró que era un buen momento para comprar artículos básicos del hogar y casi 6 de cada 10 hispanos (58 %) consideró que éste es un buen momento para comprar una casa y el 53 % para comprar un auto.